Miles de docentes, estudiantes y activistas chilenos han ratificado su apoyo a la construcción de un nuevo sistema educativo sin sexismo, violencia, abusos ni discriminación.
Sindicalistas del ámbito de la educación se movilizan para luchar contra la violencia de género en las aulas
«Apoyamos fuertemente la causa feminista y estamos por evitar todo tipo de violencia y acoso contra la las mujeres. Estamos a favor de todas las movilizaciones que hoy día se han levantado», expresó después de la gran manifestación del 6 de junio Hugo Gerter, miembro de la directiva del Colegio de Profesores de Chile (CPC), una organización miembro de la Internacional de la Educación. «[Tenemos una] educación muy centrada en los hombres y con un machismo aún marcado. Eso debe ser un cambio profundo y de largo alcance al cual aspiramos».
Esta manifestación, la tercera desde que comenzaron las movilizaciones nacionales en mayo en varias ciudades del país, estuvo convocada por la Coordinadora Feminista Universitaria (COFEU) y la Confederación de Estudiantes de Chile (CONFECH), que unieron a las federaciones universitarias y a las organizaciones de estudiantes de secundaria.
El hecho de que los y las docentes de uniesen a la acción subrayó la importancia de una educación no sexista, que estaría directamente relacionada con lo que sucede en las aulas. Las y los docentes son clave para inculcar la igualdad de género y para enseñar al estudiantado a rechazar todo tipo de acoso y discriminación.
Esta marcha contra la violencia y en favor de una educación no sexista se organizó en el contexto de múltiples tomas feministas de los campus educativos en todo el país, que situaron en primera línea del debate público la reivindicación de los derechos de las mujeres en todos los ámbitos.
«Los profesores están limitados curricularmente, políticamente y laboralmente para enfrentar los temas de acoso, de discriminación y de educación sexista» afirmó Magdalena Reyes, Encargada de Género y Primera Directora del CPC. «Como magisterio tendremos que generar una discusión sobre estos temas con cursos y talleres. En un gremio con mayoría de mujeres, debemos hacernos parte activa de este movimiento feminista que está remeciendo la sociedad chilena».
La precarización sufrida por las mujeres conduce a violencia de género
Magdalena Reyes aclaró que todas las mujeres en algún momento de sus vidas viven situaciones de abuso, precarización, invisibilidad, discriminación o violencia a causa de su género. Las expresiones de violencia sexista y patriarcal tienen diferentes orígenes: la familia, el sistema educativo, el entorno público, el entorno laboral, etc. Explicó asimismo que esto se ve incluso más agravado en el caso de las mujeres que pertenecen a una minoría sexual o étnica.
Además, Magdalena Reyes especificó que esta es la razón por la que se hace un llamamiento a todas las mujeres, no solamente a las estudiantes, para que actúen en todas las esferas en las que participan llevando a cabo tareas fundamentales para el desarrollo del país.
El 11 de junio presentó un informe sobre el sesgo de género en el sistema educativo chileno elaborado por el Departamento de Educación del Magisterio. Este documento servirá para suscitar debate entre los y las docentes de todo el país para preparar propuestas y prácticas que posibiliten el avance hacia una educación no sexista.
«Contribuir activamente como gremio a un cambio de paradigma educacional que erradique todo sesgo sexista en el sistema educativo nos parece de prioridad», señaló Magdalena Reyes.
Una iniciativa que establece un protocolo de prevención del acoso sexual en la educación superior
Actualmente las organizaciones de estudiantes están aunando fuerzas para presentar una iniciativa que establece un protocolo de prevención del acoso sexual en la educación superior, así como para proponer procedimientos de denuncia para casos que tengan lugar en las universidades.
El CPC ha recibido con los brazos abiertos la aprobación por parte de la Cámara de Diputados del proyecto de acuerdo que crea una Comisión de Mujeres y Equidad de Género permanente que podría llevar a realizar acciones en favor de la defensa y la promoción de los derechos de las mujeres, de la diversidad sexual y de la igualdad de género.
Asimismo, la Comisión Parlamentaria de Educación y Cultura ha estudiado una propuesta que califica el acoso sexual en el ámbito académico como «una vulneración a la libertad y dignidad de la persona humana, como también al principio de igualdad y no discriminación».
La propuesta afirma que «es deber de todas las instituciones de educación, de todos los niveles formativos, el adoptar activamente aquellas medidas que sean necesarias para erradicar el acoso sexual y toda forma de violencia contra las mujeres, debiendo promover el buen trato y relaciones igualitarias de género».