En diciembre del año pasado, el National Education Union y UK Feminista publicaron un informe innovador sobre el sexismo en la escuela, titulado “It’s Just Everywhere”[1].
El informe encontró que el acoso sexual, el lenguaje sexista y los estereotipos de género son algo habitual en las escuelas. Más de un tercio de las niñas en escuelas mixtas declararon haber sufrido personalmente algún tipo de acoso sexual en la escuela. Casi una cuarta parte de ellas habían sido objeto de contacto físico no deseado de naturaleza sexual. La cuarta parte de todos los docentes de secundaria observaron estereotipos y discriminación de género de manera cotidiana. El porcentaje aumenta hasta un tercio en las escuelas primarias.
El hecho que estos comportamientos y actitudes se observen de manera frecuente, a veces cada día y ‘en todas partes’, hace que parezcan algo normal y aceptable para muchos jóvenes. Tal como comentó una docente,“es el efecto gota a gota del sexismo a menor escala lo que más daño hace”. Respecto al acoso sexual o el comportamiento sexista, las niñas comentaron que “las cosas son así” o que “ los chicos piensan que está bien tocar a las chicas cuando ellos quieran”. Estos comentarios resultan chocantes y preocupantes y tienen profundas consecuencias para niños/as y jóvenes.
Resulta claramente inaceptable que los chicos piensen que tienen derecho a disponer de los cuerpos de las chicas sin su consentimiento y sin que ello tenga consecuencias. Este comportamiento ocasiona a las niñas daños tanto física como psicológicamente.
De hecho, tanto estudiantes como docentes entrevistados en el informe indicaron que, como resultado del acoso sexual, las niñas aprenden a ‘ocupar menos espacio’, situándose a un lado en los pasillos, en el patio de recreo y en el aula para resultar menos visibles. Igual de preocupante es el hecho de que los estereotipos de género sean tan persistentes en las escuelas.
Estos estereotipos perpetúan concepciones dañinas sobre lo que implica ser un hombre o una mujer. Los estereotipos a menudo legitiman un comportamiento que hace que el acoso sexual se vea como algo normal. Son tan perjudiciales para los niños como para las niñas. Nos limitan a todos, estableciendo lo que se nos ‘permite’ ser y cómo respetamos a quienes son distintos a nosotros. Tanto si es un estudiante o un profesor quien le dice a alguien que debe ‘comportarse como un hombre’ o ‘no ser niñato’, resulta vital que se combatan estos estereotipos y se los designe como lo que son: sexismo.
Así pues, ¿qué deben hacer las escuelas para hacer frente a estos comportamientos y actitudes profundamente enraizados? Para empezar ,NEU considera que las escuelas tienen que adoptar un enfoque integral. Cualquier estrategia debe empoderar a los estudiantes para que afronten y combatan el sexismo. Tiene que dar a los estudiantes la confianza necesaria para denunciar los incidentes a los docentes (porque el informe muestra que de momento apenas el 14% de los estudiantes que sufrieron algún tipo de acoso sexual dieron cuenta de ello a los/as docentes).
Este enfoque requiere escuchar a los/as estudiantes, tomar en serio sus preocupaciones y basarse en sus experiencias vividas para tratar sobre sexismo y acoso sexual en la clase y en el programa escolar.
Un elemento crucial que se requiere para combatir el sexismo en las escuelas es empoderar a los docentes para tomar medidas. ¿Cuáles serían unas estrategias preventivas eficaces? ¿Cómo podemos utilizar el programa de estudios formal e informal para contrarrestar los mensajes sexistas en la música, el cine y gran parte de la cultura popular? ¿Qué políticas escolares pueden realmente reducir el sexismo y el acoso?
Pensamos además que los docentes han de tener derecho a un desarrollo profesional de calidad sobre cómo combatir el sexismo y acabar con los estereotipos de género. Demasiados docentes indicaron en el informe no estar bien equipados y no contar con el apoyo necesario para hacer frente al sexismo. Sólo uno de cada cinco profesores de secundaria entrevistados había recibido formación sobre cómo reconocer y combatir el sexismo como parte de la Educación Inicial a la Docencia, y apenas el 22% de los profesores de secundaria contaron con un Desarrollo Profesional Continuo.
NEU quiere trabajar con sus colegas para empezar a abordar esta falta de confianza, y hemos desarrollado ya diversos materiales para los profesionales de primaria con el título Breaking the Mould(Romper el molde) que tratan sobre cómo usar libros y lecturas para reducir los estereotipos sobre niñas y niños. No obstante, es también responsabilidad del Gobierno asegurarse de que las escuelas dispongan de las herramientas, los recursos y la orientación que necesitan para hacer frente al problema.
¿Cuál es el siguiente paso?
La sugerencia más habitual por parte de docentes de escuelas primarias y secundarias para ayudarles a afrontar el sexismo era la concienciación: reconocer que el sexismo es un problema y que debe combatirse. Este ha sido el punto de partida del trabajo de NEU para abordar el sexismo en la escuela. Hemos alentado a los miembros a encargar copias del informe y nuestras pegatinas anti-sexismo y a distribuirlas en sus escuelas. También les hemos pedido que aprovechen las reuniones de personal y los días INSET para sensibilizar sobre el sexismo y explicar por qué resulta nocivo.
Hasta la fecha hemos constatado enorme energía y compromiso por parte de nuestros miembros para combatir el sexismo. Numeroso personal escolar (junto con organizaciones del sector terciario y parlamentarios) han venido hablando y publicando tuits sobre el informe y lo importante que resulta hacer frente al sexismo en la escuela. Además, hemos distribuido miles de copias de nuestros recursos sobre sexismo entre los miembros. Una breve encuesta sugirió que hasta 1 de 5 escuelas promovieron a las mujeres y los derechos de la mujer con ocasión del Día Internacional de la Mujer este año.
Estamos congregando a nuestros afiliados/as para discutir sus experiencias sobre sexismo en la escuela y utilizar actividades colectivas como vehículo para aportar ideas y estrategias sobre cómo abordar el sexismo. El 17 de marzo asistí a una conferencia organizada por una organización miembro de NEU sobre la lucha contra el sexismo en la escuela. Fue un evento fantástico que contó con la asistencia de más de un centenar de docentes y estudiantes. Incluyó talleres sobre diversos temas, incluyendo ‘empoderar a los jóvenes para combatir el sexismo’ y ‘combatir el sexismo con los hombres y chicos’.
Esto es solo el comienzo de un compromiso a largo plazo por parte de NEU para luchar con los docentes y los alumnos contra el racismo y el acoso sexual. Durante nuestra conferencia anual en Brighton en abril se aprobó una moción precisamente sobre este tema –una clara señal de que nuestros miembros quieren que la lucha contra el sexismo se convierta en una prioridad para el sindicato–.
Queremos continuar trabajando con nuestros miembros, las escuelas, el Gobierno y otros organismos educativos para desarrollar un enfoque escolar integral contra el sexismo. Sabemos que el sexismo es un problema presente en todas las escuelas. Nos incumbe ahora a todos nosotros en la comunidad educativa tomar medidas concretas al respecto.
Las opiniones expresadas en este blog pertenecen al autor y no reflejan necesariamente ninguna política o posición oficial de la Internacional de la Educación.