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David Edwards, General Secretary of Education International.
David Edwards, General Secretary of Education International.

En el segundo aniversario del golpe militar en Myanmar, la Internacional de la Educación (IE) se sumó al Día Mundial de Acción convocado por la Confederation of Trade Unions Myanmar (CTUM) exigiendo el reconocimiento diplomático formal del Gobierno de Unidad Nacional como representante legítimo del pueblo de Myanmar, así como la liberación de todos los presos políticos.

El Consejo Global Unions (CGU) hizo pública una declaración reclamando esfuerzos globales renovados para restaurar la democracia. Se pidió a todos los sindicatos afiliados del CGU que exigiesen a sus respectivos Gobiernos nacionales el reconocimiento del NUG y ejercer presiones sobre las empresas multinacionales para que corten cualquier vínculo comercial que beneficie directa o indirectamente a la Junta.

El 1 de febrero de 2021, el ejército de Myanmar depuso al Gobierno elegido democráticamente, instaurando un Gobierno ilegítimo. La población de Myanmar, que había participado masivamente en las elecciones democráticas de 2020, se opuso mayoritariamente al golpe, formando el Movimiento de Desobediencia Civil (MDC), para resistirse pacíficamente a la nueva dictadura militar. Los políticos democráticamente electos establecieron por su parte el Gobierno de Unidad Nacional (NUG por sus siglas en inglés).

La respuesta de la junta fue brutal. En los últimos dos años, el régimen se ha mantenido en el poder imponiendo la fuerza, el miedo, la intimidación y el terror. Han cargado contra los manifestantes ocasionando cientos de muertos y miles de heridos. Han detenido a líderes legítimamente electos y a miles de manifestantes, muchos de los cuales fueron torturados. La mayoría de los sindicatos fueron prohibidos, imposibilitando el ejercicio de la libertad sindical.

Violación de los derechos de trabajadores y trabajadoras de la educación

En un reciente informe publicado en enero de 2023, la organización neerlandesa FNV Mondiaal documenta las violaciones de los derechos de los trabajadores y las trabajadoras en Myanmar bajo el nuevo régimen militar. Según dicho informe, al menos 24 docentes fueron asesinados por los militares en los últimos dos años; 234 fueron detenidos; al menos 20.000 docentes de universidad y de escuela fueron despedidos; y más de 120.000 docentes figuran en listas negras y se arriesgan a ser detenidos por sumarse al MDC. Según Amnistía Internacional, en el país hay 7,8 millones de niños y niñas sin escolarizar.

FNV Mondiaal informó también sobre el caso de U Kaung Kyaw, un maestro del municipio de Myaung (Hintada, División de Ayerawaddy) acusado en base a la Ley Antiterrorista y condenado a muerte el 30 de diciembre de 2022. La Myanmar Federation of Teachers y otros sindicatos de la educación en el país publicaron una declaración denunciando la condena a muerte y la escalada de la violencia desplegada contra el personal de la educación.

El Dr. U Arkhar Moe, presidente de la University Teacher Association y profesor en la Universidad de Yangon fue liberado de prisión el 4 de enero de 2023. Había sido detenido el 3 de marzo de 2021 y el 20 de enero de 2022 fue condenado a tres años de prisión por un tribunal militar.

Solidaridad renovada con los trabajadores y las trabajadoras de Myanmar

La Internacional de la Educación ha venido trabajando en estrecha colaboración con la Myanmar Federation of Teachers y el Ministerio de Educación del NUG, en apoyo a los valores democráticos y su ejercicio a través de la educación.

En este segundo aniversario del golpe militar, el movimiento sindical internacional mantiene su firme solidaridad con el pueblo y la gente trabajadora de Myanmar. La Internacional de la Educación se suma a la Agrupación Global Unions instando a sus afiliados a exigir a sus respectivos Gobiernos nacionales el reconocimiento del NUG y que ejerzan presiones sobre las empresas multinacionales con las que trabajan para que corten cualquier vínculo que beneficie directa o indirectamente a la Junta.

Una de las principales reivindicaciones por parte de los sindicatos de Myanmar es el reconocimiento diplomático formal del NUG. La junta busca normalizar su control obteniendo el reconocimiento diplomático en tanto que Gobierno de facto en Myanmar. A pesar de ser el representante legítimo y democráticamente electo por el pueblo de Myanmar, el NUG no cuenta aún con el reconocimiento diplomático formal universal.

En 2021, la Agrupación Global Unions reclamó que las multinacionales observasen una diligencia debida reforzada, cortando sus vínculos comerciales directos y asociados con la junta militar en Myanmar, Aunque algunas empresas han dejado de hacer negocios en Myanmar, el ejército ha podido acceder a la cadena mundial de suministros de distintas empresas de Estados Unidos, Europa y Asia, para la fabricación de armas.