Ei-iE

Photo: Flickr/GPE/Carine Durand
Photo: Flickr/GPE/Carine Durand

Transformar la educación: ¿qué papel se otorgará a los libros de texto y bajo qué condiciones?

publicado 11 enero 2023 actualizado 24 enero 2023
Escritos por:
Suscríbete a nuestros boletines

Los días 16, 17 y 19 de septiembre de 2022 se celebró en Nueva York la Cumbre Mundial sobre la Transformación de la Educación. Su objetivo era encontrar una respuesta adecuada a la crisis educativa. Más allá del reto de la equidad y la igualdad, lo que está en juego es la adaptación de los sistemas educativos a sus fines. Como dijo el secretario general de la ONU, la educación ya no proporciona a jóvenes y adultos "los conocimientos, la experiencia, las aptitudes o los valores necesarios para desarrollarse plenamente en un mundo en rápida evolución". El aprendizaje sigue infravalorando competencias como la resolución de problemas, el pensamiento crítico y la empatía" (pag. 1). Nos encontramos en el centro de la tan conocida cuestión de la calidad de la educación. Una cuestión que encierra diversas vertientes. La UNESCO, en su cumbre de junio de 2022 en París, enumeró cinco: calidad de los centros educativos, aprendizaje y competencias, docentes y enseñanza, aprendizaje y transformación digital, y financiación de la educación.

¿Dónde colocaríamos el libro de texto en la lista anterior? En todos los niveles, creo que cabe decir que el libro de texto está destinado a estar presente en el aula, a facilitar el aprendizaje y la adquisición de competencias, a servir como herramienta de planificación y fuente de documentación, información y ejercicios tanto para el personal docente como para el alumnado, y a estar disponible en versiones digitales. ¿Y cómo pensar en la transformación de la educación sin tener en cuenta la calidad de una herramienta pedagógica tan difícil de eludir? ¿En qué consistiría esta calidad y cómo se determinaría? ¿Quién sería responsable de esta tarea y cómo podría esta persona garantizar su éxito?

Para ayudar a responder a estas preguntas, entre otras, en 2019 decidimos reunir a un equipo de investigadores, con el apoyo de la Friedrich Ebert Foundation de Yaundé, para abordar la persistente crisis del libro de texto en Camerún.

Los libros de texto en Camerún: panorama de la situación actual

El trabajo se estructuró en dos etapas. La primera fase se centró en las cuestiones políticas y, por tanto, pretendía poner de relieve la forma en que los procesos de puesta a disposición de los libros de texto en Camerún manifiestan la citada crisis. El resultado fue la producción de una obra conjunta [1]. La segunda se centró en los aspectos técnicos de la elaboración de libros de texto de calidad. Las contribuciones ya finalizadas se publicarán próximamente bajo el título Améliorer les manuels scolaires au Cameroun : enquête sur les déterminants de la qualité (Mejora de los libros de texto en Camerún: estudio de los factores determinantes de la calidad).

En la primera serie de reflexiones realizadas en el marco de este proyecto, los expertos hicieron un diagnóstico y esbozaron varias soluciones: consideración desigual de las competencias del siglo XXI (Prof. Fotsing Mangoua); relación calidad/precio insatisfactoria desde el punto de vista de los padres y madres de estudiantes (encuesta del Dr. Basile Difouo); conflicto ético entre el "exterior" y el "interior" mal gestionado debido a una "tiranía del programa oficial que no asocia los aspectos culturales, sociales y económicos" (Dr. Foulla Damna Appolinaire); competencias cuestionables de los principales actores del sector y débil mecanismo de control de los procesos de producción (Prof. Renée Solange Nkeck Bidias); reglas de selección cuestionables [2] porque, tal como señala la Prof. Patricia Bissa Enama, "una lista elaborada y acordada de libros de texto deja entrever la amenaza de la centralización, la monopolización y el absolutismo, que son perjudiciales para la valorización del conocimiento en sus idiosincrasias y sus matices"; la indisponibilidad patente de libros de texto en el mercado y en manos de los usuarios finales (Prof. Lilian Lem Atanga); la ausencia de una verdadera política para el sector cultural en general y el subsector del libro en particular, con graves consecuencias (Ghemkam T. Grâce Alvine). Este diagnóstico puso de relieve, de forma casi natural, "el imperativo de integrar la reforma de los libros de texto en la reforma general del sistema educativo y, a largo plazo, con vistas a elaborar (¡por fin!) una auténtica política nacional de educación" (Prof. Jacques Evouna).

Hacia unos libros de texto de calidad

Para la segunda serie, el equipo de expertos se propuso identificar los factores determinantes de la calidad de los libros de texto y se centró en el contenido de las asignaturas, los aspectos transversales, los agentes del proceso y el propio proceso de producción.

En cuanto a la calidad de los contenidos de las asignaturas, el Prof. Evouna se centró en los manuales de lengua francesa y observó que el déficit cualitativo es consecuencia de la obsolescencia de ciertos contenidos didácticos, lo cual asoció a una cierta desconfianza en los resultados de las investigaciones universitarias en la reflexión sobre los contenidos escolares. Esta deficiencia cualitativa se ve acentuada por la impertinencia del corpus utilizado y la inadecuación pedagógica. El Dr. Tamekamta analizó los contenidos de los libros de texto de humanidades y ciencias sociales y mostró claramente que no se han tenido en cuenta los planes de estudios oficiales, una deficiencia fundamental que afecta gravemente a su calidad.

En cuanto a las cualidades transversales de los libros de texto, el Dr. Difouo señala la falta de conformidad de los libros de texto con el enfoque pedagógico vigente, en este caso según criterios basados en la competencia (el APC en francés), basándose en el análisis de los libros de texto de las asignaturas de idiomas/literaturas y humanidades del plan de estudios camerunés. A ello añade la escasa contextualización y el predominio de técnicas pasivas. Al analizar los libros de texto de matemáticas e inglés de los niveles Class 4 y CE2 (primaria), Form 1 y 5º (secundaria) del programa camerunés, la Prof. Lilian Atanga y el Dr. Fotso Guesche constatan el bajísimo nivel de incorporación de material que invite a la reflexión crítica, sin duda debido a la falta de intencionalidad y, por tanto, de sistematización. El Sr. Kaffo señala que el parámetro de la inclusión no se tiene en cuenta en la selección oficial de los libros de texto, sin duda debido a las lagunas jurídicas que la legislación camerunesa todavía debe colmar, así como a la ausencia de un mecanismo de evaluación. Para cerrar esta sección, la Dra. Rachel Sonkin demuestra, basándose en dos manuales de historia —uno de 1957 y otro de 1985—, que el sistema escolar poscolonial de Camerún ha conservado los contenidos de su época colonial.

En cuanto a la calidad de los actores de la cadena del libro de texto, el Sr. Kaffo concluye que hay que definir cuidadosamente el perfil del autor (una combinación de sus tres identidades: técnica, profesional y civil), reposicionarlo en el centro de la cadena del libro de texto y actualizar su perfil socioeconómico. Tras un análisis, los editores profesionales Fabrice Amougou y Serge Kouam, afirman que el papel (y, por tanto, la responsabilidad) del editor de libros de texto es y debe seguir siendo auxiliar al del Estado; y que hay que prestar atención a los vínculos entre la fiscalidad, la indisponibilidad/escasez de recursos iconográficos y documentales, y la calidad o falta de calidad del libro de texto.

La reflexión final, a cargo de la Dra. Lekane Brigitte sobre el propio proceso de producción, pone de relieve los riesgos del enfoque sistémico actual antes de proponer como modelo alternativo el intervencionismo en red y la planificación financiera única que hace que sea el Estado quien encargue y adquiera toda la producción resultante.

1. ^

Le Manuel scolaire au Cameroun: enjeux, diagnostic et esquisses de solutions pour une politique sectorielle (El manual escolar en Camerún: retos, diagnóstico y esbozos de soluciones para una política sectorial), Friedrich Ebert Stiftung, Yaundé (Camerún), 2019.

2. ^

En particular, una política de libro único adoptada en 2017 en los textos oficiales.

Las opiniones expresadas en este blog pertenecen al autor y no reflejan necesariamente ninguna política o posición oficial de la Internacional de la Educación.