En la tercera jornada del Congreso, los delegados y delegadas pasaron a debatir las resoluciones y a participar en debates relacionados con el tema «Promover la profesión».
Las resoluciones adoptadas en la tercera jornada del Congreso incluían el marco mundial de la IE y la UNESCO para los estándares profesionales de la enseñanza, el futuro de la profesión docente, la salud mental del profesorado, la libertad académica en la enseñanza superior y el personal de apoyo educativo.
Asimismo, continuaron las cuatro sesiones temáticas que permiten a los delegados y delegadas profundizar en sus debates, centrados en esta ocasión en el profesionalismo docente y en cómo desarrollarlo.
Vivir nuestros valores - profesionales autónomos
La sesión se centró en cómo los sindicatos de la educación pueden tomar la iniciativa para lograr una educación de calidad en sus comunidades a través del diálogo social y la negociación colectiva. Frente a desafíos como la privatización de la educación, los salarios basados en el rendimiento y las condiciones de trabajo precarias del profesorado, la autonomía del personal docente puede marcar la diferencia, especialmente a la hora de contrarrestar la interferencia autoritaria de los gobiernos. Entre los ponentes figuraron responsables de la educación superior de Canadá, Malasia, Hungría, Brasil y Ghana.
Hacer que suceda - estándares profesionales
Los/as participantes de este debate paralelo analizaron la función de los estándares profesionales de la enseñanza y cómo contribuyen a aumentar la influencia de los sindicatos. Los ponentes fueron representantes de la educación de Escocia, Portugal, Uganda y Estados Unidos.
Asumir el liderazgo - defender la profesión
Líderes sindicales de Francia, Argentina, Senegal y Japón aportaron sus puntos de vista sobre las mejores estrategias de defensa y compromiso para defender la profesión docente a escala mundial. Los/as participantes también reflexionaron sobre nuevas ideas para iniciativas de campaña y comunicación.
Renovación sindical - diálogo político
La renovación sindical siguió siendo un tema clave para el Congreso, con debates sobre la recopilación de información, datos e investigaciones. El objetivo de los delegados y delegadas también era identificar nuevas funciones para los sindicatos en las sociedades, con el fin de asumir el liderazgo en el diálogo político y las políticas educativas. El ponente principal venía de la Ghana National Association of Teachers.
«El futuro empieza en el aula con nuestros docentes»
En su discurso de apertura para la sesión plenaria, el Dr. Jordan Naidoo, de la UNESCO, retomando el tema de la jornada «Promover la profesión docente», subrayó la importancia de contar con docentes cualificados para alcanzar el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4, cuya finalidad es garantizar una educación equitativa e inclusiva de calidad y promover oportunidades de aprendizaje a lo largo de la vida para todos de aquí al 2030.
Sin embargo, los últimos resultados claves no son alentadores, e indican que «el mundo no está en camino de alcanzar este objetivo», según Naidoo - director de la División de Apoyo y Coordinación para la Agenda Educación 2030 de la UNESCO.
«Si se mantienen las tendencias actuales, 220 millones de niños, niñas y jóvenes seguirán excluidos de la escuela en 2030 y uno de cada tres jóvenes no terminará la educación secundaria. A pesar de los progresos realizados, muchos países aún están lejos de lograr la igualdad de género... Se trata de una crisis educativa creada por la falta de compromiso y atención por parte de los responsables políticos para abordar la desigualdad y la cuestionable calidad de la educación», declaró Naidoo ante los 1400 delegados y delegadas procedentes de todo el mundo.
Además, señaló que, en diferentes grados, «el sistema educativo no está abordando adecuadamente el reto de la desigualdad ni el compromiso de la Agenda 2030 de no dejar a nadie atrás... Una desigualdad relacionada con la desventaja social, el género, la discapacidad, la migración o el aislamiento geográfico».
Abogó por mejores políticas, datos y financiación para responder al doble desafío de la equidad y la calidad porque «la educación es un derecho».
Entre la miríada de acciones recomendadas, Naidoo insta a que se adopten medidas para atraer a la enseñanza a los candidatos adecuados, mediante estructuras salariales competitivas e incentivos y la mejora de la condición del personal docente, políticas de distribución del personal equitativas y la creación de estructuras de desarrollo profesional y apoyo apropiadas.
Naidoo cree firmemente que para promover la enseñanza como profesión, «será necesario que todos nosotros —los educadores y sus sindicatos, los gobiernos, la sociedad civil y otros actores— nos unamos en una acción conjunta. Esta coalición es hoy más importante que nunca, en un entorno que promueve la estandarización en detrimento de la calidad y la igualdad, y en el que muchos creen que el personal docente hace un trabajo que cualquiera puede hacer, que puede ser sustituido por la tecnología, y que necesitamos escuelas «a prueba de docentes», tal como demuestra la creciente privatización de la educación».
También subrayó que se necesita una inversión suficiente en educación para subsanar el déficit de financiación y garantizar que se dispone de los recursos necesarios para sufragar los gastos a largo plazo y recurrentes que conlleva la educación en materia de salarios e incentivos, así como los gastos no salariales.
«Si queremos el futuro soñado por los líderes mundiales y por los jóvenes y los ancianos en todas las partes del mundo, tendremos que empezar en el aula. Necesitamos empezar por todo el conjunto estudiantil, y necesitamos empezar por sus docentes».