Los sindicatos de docentes de todo el mundo han condenado los continuos ataques perpetrados contra escuelas, profesores, estudiantes y comunidades lumad de Filipinas, una muestra de solidaridad que tiene lugar después de que la Internacional de la Educación (IE) realizara un llamamiento a la acción.
El 26 de julio, la Internacional de la Educación (IE) instó a sus afiliados a que condenaran a nivel mundial el continuo acoso y los ataques dirigidos contra estudiantes, docentes y activistas de derechos humanos de las comunidades indígenas luma dde la isla de Mindanao, en Filipinas. La Internacional de la Educación fue alertada de estos ataques militares y paramilitares por su afiliada filipina, la Alliance of Concerned Teachers(ACT).
Llamamiento urgente a la acción
La IE ha instado a todas sus organizaciones miembros a tomar medidas inmediatas:
· Enviando una carta de protesta al presidente Rodrigo Duterte, así como a las autoridades pertinentes en Filipinas (ver el model o de carta).
· Poniéndose en contacto con sus Gobiernos individuales y con la representación diplomática de Filipinas en sus países.
· Solicitando entablar un diálogo sobre estas cuestiones con las autoridades filipinas.
· Emitiendo declaraciones públicas para condenar los ataques contra las comunidades educativas lumad de la isla de Mindanao.
· Poniendo de relieve esta situación en sus redes sociales.
Apoyo general
Después de que la IE realizara este llamamiento, el National Union of Teachers(NUT-RU), el Union of Education Norway y el Australian Education Union emitieron inmediatamente cartas de protesta y de condena pública de los ataques.
Además de los sindicatos de docentes, el Canadian Union of Public Employees(CUPE), ha condenado públicamente los ataques a través de la ACT y enviado una carta de apelación al presidente Duterte solicitando la liberación inmediata de Amelia Pond, una investigadora de un centro lumad que actualmente se encuentra retenida bajo cargos falsos; el cese de las amenazas, del acoso y de la intimidación de los docentes de las escuelas lumad; la disolución de todos los grupos paramilitares que operan bajo las fuerzas armadas del Estado; así como la cancelación del programa de contrainsurgencia filipino que ha dado lugar a numerosos casos de violaciones de los derechos humanos; y, finalmente, ha instado al Gobierno de Filipinas a que cumpliera y respetara la Declaración Universal de Derechos Humanos y todos los principales instrumentos de derechos humanos.
“En sus declaraciones, el Union of Education Norway(UEN), el Australian Education Union(AEU) y el National Union of Teachers(NUT-Londres) se han comprometido a supervisar continuamente la situación y a movilizar más recursos si el Gobierno mantiene la persecución de las comunidades indígenas”, afirmó el secretario general de ACT y miembro del Consejo Ejecutivo de la IE, Raymond Basilio. “Por otra parte, los sindicatos han calificado los ataques perpetrados contra las escuelas lumad como una violación del derecho a la educación de miles de niños lumad”.
El presidente nacional de la ACT, Benjamin Valbuena, también puso de manifiesto las preocupaciones del CUPE.
ACT: Llamamiento a la acción presidencial
La ACT volvió a instar al presidente Rodrigo Duterte a que se retractara inmediatamente de su declaración que ordenaba el bombardeo de las escuelas lumad y enjuiciara a los autores de los ataques perpetrados contra escuelas, docentes, estudiantes y defensores de los derechos humanos de la comunidad lumad.
Valbuena añadió que su sindicato exige al presidente de Filipinas que también ordene la detención inmediata de los agentes militares y paramilitares implicados en los asesinatos de Emerito Samarca, Emelito Rotimas, Leonila Tapsadan y Ramón Pesadilla y que garantice la liberación incondicional de la maestra lumad Amelia Pond.
Asimismo, señaló que los docentes de Filipinas y del extranjero seguirán emprendiendo acciones y movilizaciones masivas hasta que el Gobierno respalde el derecho a la educación y a una comunidad pacífica del pueblo lumad.