El 10º Congreso Mundial de la Internacional de la Educación (IE), celebrado en Buenos Aires (Argentina) del 29 de julio al 2 de agosto de 2024:
Recuerda las resoluciones de la IE sobre los derechos de los pueblos indígenas y sobre la educación de los pueblos indígenas, adoptadas por el Primer Congreso Mundial en 1995; sobre los derechos de los pueblos indígenas, adoptada por el Segundo Congreso Mundial en 1998; sobre la educación en la diversidad cultural, adoptada por el 4º Congreso Mundial en 2004; sobre la diversidad cultural, adoptada por el 5º Congreso Mundial en 2007; sobre la diversidad lingüística, adoptada por el 7º Congreso Mundial en 2015; y sobre la descolonización de la educación, adoptada por el 8º Congreso Mundial en 2019.
Recuerda los términos de la Declaración de las Naciones Unidas sobre los derechos de los pueblos indígenas, la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, el Pacto Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos, el Convenio sobre pueblos indígenas y tribales (núm. 169) de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el Convenio sobre la violencia y el acoso (núm. 190) de la OIT, y los numerosos instrumentos internacionales sobre la prevención de la discriminación.
Recuerda que la Constitución de la IE encomienda a la IE “luchar contra todas las formas de racismo o de discriminación en la educación y en la sociedad por motivos de género, estado civil, orientación sexual, edad, religión, opinión política, estatus socioeconómico u origen nacional o étnico”.
Reconoce que la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) proclamó el periodo 2022-2032 como Decenio Internacional de las Lenguas Indígenas del Mundo, ya que muchos idiomas indígenas están por desaparecer, y la libertad de idioma es indispensable para la libertad de pensamiento y expresión y para el respeto del derecho a la educación.
Reconoce el trabajo resiliente de las organizaciones miembro de la IE, el personal docente y el personal de apoyo educativo en el cumplimiento del derecho a una educación de calidad para estudiantes indígenas en medio de contextos desafiantes.
El 10º Congreso Mundial reconoce que:
La salvaguardia de los derechos humanos del alumnado, el profesorado, personal de apoyo educativo indígenas y de todos los pueblos indígenas es fundamental para la plena realización de los derechos de toda la humanidad y la protección de nuestro planeta.
Las diversas culturas, los idiomas de los pueblos indígenas, los recursos naturales y su relación con los mismos, enriquecen el patrimonio cultural de la humanidad y merecen ser protegidos como vehículos de cultura e identidad.
La relación de los pueblos indígenas con sus tierras, vías fluviales, territorios y recursos constituye el eje de su identidad, bienestar, cultura y soberanía; sin embargo, los derechos de los pueblos indígenas a sus tierras, vías fluviales, territorios y recursos siguen estando limitados o no reconocidos debido a la creciente militarización, extracción, usurpación de tierras y violación de los tratados.
Siguen existiendo brechas entre lo que garantizan los instrumentos internacionales y nacionales y la forma en que los Estados aplican estos derechos, en particular en lo que respecta a los derechos de los niños y la juventud indígenas, las mujeres y las niñas indígenas, y las personas indígenas con alguna discapacidad.
Los defensores y las defensoras y activistas de los derechos humanos y laborales de los pueblos indígenas se enfrentan a enormes riesgos y represalias, que pueden ir desde la criminalización, el acoso en línea, la vigilancia, hasta agresiones y asesinatos, por el hecho de defender tierras y derechos de dichos pueblos, especialmente ante la crisis climática mundial.
La pandemia de COVID-19, la privatización de la educación, la digitalización, la inseguridad alimentaria, la migración y el cambio climático han agravado las desigualdades estructurales, con repercusiones sanitarias, socioeconómicas y culturales desproporcionadas para los pueblos indígenas.
La discriminación y la violencia son fenómenos recurrentes en la vida de muchas mujeres y niñas indígenas, incluso en los espacios en línea, redes sociales y medios de comunicación, y las y los perpetradores son a menudo tratados con impunidad y las leyes no son cumplidas.
Las iniciativas lideradas por algunos Gobiernos para documentar y preservar la memoria histórica y su legado actual, a través de instrumentos como comités de investigación o comisiones de reconciliación, deben basarse en la verdad, la integridad, la rendición de cuentas y la justicia, e incluir la participación significativa y supervisión de los pueblos indígenas en su desarrollo, trabajo, resultados, análisis y aplicación de recomendaciones.
El 10º Congreso Mundial reconoce además que:
Todas las medidas adoptadas para reconocer y combatir el legado y la continua colonización, asimilación, exclusión y genocidio cultural que afectan a los pueblos indígenas, en particular en los sistemas educativos, deben basarse en una participación significativa y efectiva de los pueblos indígenas y la obtención de su consentimiento libre, previo e informado.
Los sindicatos de la educación, como voz colectiva organizada de la profesión docente, y en consonancia con su mandato de justicia social y sus estructuras democráticas, desempeñan la función única de promover los derechos y reparación de los errores cometidos contra los pueblos indígenas en y a través de la educación en todo el mundo.
El profesorado, líderes educativos, y el personal de apoyo educativo indígenas soportan a menudo mayores cargas de trabajo, con responsabilidades culturales adicionales, sin recibir remuneración, apoyo para investigación, asignación de vacaciones ni compensación adecuadas. A su vez, se ven afectados por infraestructura educativa inadecuada, servicios sanitarios precarios y falta de acceso a tecnologías de la información.
La escasez mundial de docentes afecta con más intensidad a las comunidades indígenas, en particular en la enseñanza de idiomas y a los y las que tienen contratos temporales, y, sin embargo, los pueblos indígenas se enfrentan a estructuras de cualificaciones discriminatorias que les niegan el escalafón docente y el acceso a la profesión.
Los planes de estudios que describen con precisión la historia, los conocimientos, la cultura y las experiencias de los pueblos indígenas se topan a menudo con la escasez de financiación, la censura, y muchos sistemas siguen proporcionando planes de estudios y recursos que resultan culturalmente irrelevantes, están basados en estereotipos discriminatorios o no representan las realidades actuales de los pueblos indígenas, lo que repercute negativamente en el conjunto del alumnado.
El gasto público y los presupuestos de educación se están reduciendo, en promedio, en todo el mundo, lo que repercute directamente en los pueblos indígenas, que ya tienen que afrontar presupuestos y programas de educación carentes de financiación suficiente.
El 10º Congreso Mundial insta a las organizaciones miembros a:
Promover una educación para los pueblos indígenas que se desarrolle con su plena participación, a fin de satisfacer los derechos, las aspiraciones y las necesidades de sus comunidades.
Reafirmar su solidaridad con los defensores y las defensoras indígenas locales de los derechos humanos y de la tierra y condenar todo acto de intimidación, acoso y violencia contra los pueblos indígenas y sus aliados.
Crear entornos sindicales acogedores y respetuosos que afirmen la cultura a fin de reclutar y retener a miembros indígenas.
Reforzar la voz y la representación de los pueblos indígenas, especialmente de los y las jóvenes indígenas, a nivel interno, mediante estructuras específicas y de representación en la cúpula sindical, y a nivel externo, en las delegaciones a las conferencias y actos de la IE, para satisfacer mejor las necesidades de los pueblos indígenas como miembros de los sindicatos.
Promover los derechos colectivos de los pueblos indígenas a la autodeterminación en reconocimiento de su identidad cultural, en particular el derecho a aprender, a proteger y enriquecer sus tierras, y a utilizar su propio idioma.
Celebrar el Día Internacional de los Pueblos Indígenas el 9 de agosto, a través de actividades de comunicación a escala nacional y en colaboración con la IE, así como otras jornadas nacionales o locales de celebración o conmemoración.
Abogar por que sus Gobiernos adopten las medidas políticas, legislativas y otras medidas concretas apropiadas para:
Ratificar y aplicar el Convenio 169 sobre pueblos indígenas y tribales de la OIT, el Convenio 190 de la OIT, los principales tratados de derechos humanos y la correspondiente legislación nacional, e incorporar dichos instrumentos en sus planes nacionales, con la participación de los pueblos indígenas y en consulta con ellos.
Desarrollar y aplicar Planes de Acción Nacionales para el Decenio de las Naciones Unidas de las Lenguas Indígenas en consulta con los pueblos indígenas.
Proporcionar planes de estudios, materiales y recursos que reflejen la educación, los idiomas, las culturas, la historia, los sistemas de conocimiento y las epistemologías indígenas en los idiomas indígenas, así como formación y desarrollo profesional continuo del profesorado para proporcionar una educación de calidad con condiciones de trabajo dignas.
Asegurar que el currículo nacional incluya conocimiento de la historia, de la riqueza cultural y lingüística de los pueblos indígenas como patrimonio de la humanidad, de modo que se promueva su valorización y la importancia de su preservación.
Promover la participación corresponsable entre los Gobiernos y los pueblos indígenas en la administración de las instituciones educativas ubicadas en sus territorios y en la evaluación de las políticas educativas.
Aumentar la inversión en los presupuestos de educación pública específicamente para los pueblos indígenas, integrando plenamente a los pueblos indígenas y sus sindicatos de educación en las decisiones de gasto y supervisión.
Incorporar a los pueblos indígenas en todos los procesos de educación de la primera infancia, diversos procesos educativos, y procesos de incidencia y planificación educativa desde sus etapas iniciales, de modo que sean una parte integral del sistema educativo en general.
Involucrarse en mecanismos de la ONU relativos a los derechos de los pueblos indígenas, como participar en convocatorias para aportes o visitas de país por parte del Relator Especial de la ONU sobre los derechos de los pueblos indígenas y responder a las recomendaciones y conclusiones del Relator/a Especial en informes temáticos o de país..
El 10º Congreso Mundial encomienda a la IE:
Solicitar al Consejo Ejecutivo que establezca un Órgano Consultivo de los Pueblos Indígenas de conformidad con el artículo 14 de la Constitución, para democratizar en mayor medida la estructura de la IE, y dar voz legítima y auténtica a los miembros indígenas de la IE. El propósito del Órgano Consultivo de los Pueblos Indígenas se considera es:
Definir y desarrollar una política integral y un plan de acción para que la IE coordine y organice mejor las iniciativas de defensa, la investigación y las actividades de desarrollo de capacidades.
Proponer formas de desarrollar una red de pueblos indígenas entre las organizaciones afiliadas de la IE para facilitar el intercambio de experiencias, conocimientos y optimizar las oportunidades de colaboración.
Desarrollar, a través de consultas con las organizaciones miembros y los pueblos indígenas que estas representan, un plan para el Decenio de las Lenguas de las Naciones Unidas.
Apoyar la acción solidaria, cuando surja la necesidad, y concienciar sobre los problemas sistémicos a los que se enfrentan los pueblos indígenas a través de las organizaciones afiliadas de la IE y la sociedad civil en general, en particular cuando se vulneren los derechos a la soberanía y a la tierra.
Garantizar que las perspectivas y cuestiones de los pueblos indígenas estén representadas en todo el trabajo programático y de promoción, y en y a través de campañas, en particular las campañas en curso: ¡Por la pública! Creamos escuela y Educar por el Planeta.
Alentar y permitir a los pueblos indígenas y sus representantes conectarse entre sí a escala regional para compartir experiencias, dialogar y apoyarse mutuamente para proteger mejor los derechos de los pueblos indígenas, en particular habilitando un espacio y recursos para que un caucus de pueblos indígenas se reúna en los eventos de la IE y en la Conferencia Mundial de los Pueblos Indígenas sobre Educación.
Desarrollar alianzas con organizaciones indígenas mundiales, nacionales y locales para identificar las mejores vías para descolonizar la educación y los sistemas de conocimiento, combatir el impacto de la crisis climática en los territorios y poblaciones indígenas, garantizar la igualdad de género, combatir el fraude de identidad indígena, promover el bienestar de estudiantes y docentes, y cumplir con los derechos de los pueblos indígenas.