La salud de Jafar Ebrahimi, miembro del Consejo de Coordinación de las Asociaciones Sindicales de Docentes de Irán (CCITTA), se ha deteriorado considerablemente durante su injusto encarcelamiento en Irán. Por ello, la Internacional de la Educación ha hecho un llamamiento a las autoridades iraníes para que concedan un permiso médico urgente a este docente sindicalista.
Jafar Ebrahimi lleva veinte meses encarcelado en Irán. Sufre una enfermedad intestinal y su estado se ha deteriorado considerablemente durante su reclusión. En este periodo, solo le han permitido recibir tratamiento en un hospital en una ocasión y fue bajo estrictas medidas de seguridad. Tras ello, le negaron el derecho a recibir atención médica integral.
A día de hoy, la diabetes de Ebrahimi ha empeorado. Además, según la información de sus compañeros de prisión, parece que también sus ojos corren peligro. Sin una hospitalización médica inmediata y adecuada, Ebrahimi podría perder la vista completamente.
A todo esto, el pasado 3 de septiembre, en lugar de conceder el permiso a Ebrahimi para ser hospitalizado, las autoridades lo trasladaron de la prisión de Evin al centro de detención de Qezal Hesar, a las afueras de Teherán. Lo hicieron tras presentar nuevos cargos contra él que lo acusaban de "amenazar la seguridad de la nación" y "perturbar la paz de la sociedad".
Ahora, junto con otros 12 presos trasladados a Qezal Hesar, Jafar Ebrahimi ha iniciado una huelga de hambre: exige que lo devuelvan a la prisión de Evin y que desestimen todos los nuevos cargos que se le imputan. En el nuevo centro de detención, por cierto, no se le permite mantener contacto con su familia, que está muy preocupada por su salud.
El 6 de septiembre, la Internacional de la Educación (IE) presentó una carta de protesta a las autoridades iraníes solicitando una baja médica urgente para Ebrahimi para que pueda recibir atención médica especializada y cuidados adecuados con la máxima rapidez. La IE subraya que responsabiliza al gobierno iraní de cualquier daño que puedan sufrir los docentes sindicalistas mientras estén encarcelados en la República Islámica de Irán.
La Internacional de la Educación y su organización afiliada, el CCITTA, piden la liberación inmediata de todos los docentes sindicalistas que siguen encarcelados en Irán.