El 67º periodo de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la ONU (CSW67), que tuvo lugar en Nueva York entre el 6 y el 17 de marzo, adoptó unas Conclusiones reconociendo el papel crítico de la tecnología y la innovación, así como los desafíos existentes, para lograr la igualdad de género en la era digital.
Conclusiones convenidas
El texto, de 31 páginas, se finalizó a altas horas de la noche del último día, tras más de una semana de intensas negociaciones. El documento se centra en el tema prioritario de este año: “Innovación y cambio tecnológico, y educación en la era digital para lograr la igualdad entre los géneros y el empoderamiento de todas las mujeres y las niñas”. Tras reafirmar mensajes políticos acordados anteriormente y hacer referencia a instrumentos internacionales establecidos, menciona la necesidad de avanzar con nuevas propuestas para salvar la brecha digital de género.
Importantes fuerzas de oposición intentaron diluir las referencias a los derechos laborales de las mujeres durante las negociaciones, pero gracias a los Gobiernos progresistas y las presiones ejercidas por el movimiento sindical, con el apoyo de la OIT, el texto final adoptado por la Comisión reclama políticas laborales que respeten las normas de la OIT, el trabajo decente y unos empleos de calidad para las mujeres, igual salario por trabajo de igual valor, el derecho a la sindicalización y la negociación colectiva, y la eliminación del acoso sexual y las prácticas discriminatorias en el desarrollo profesional.
La educación es clave
El texto incluye importantes referencias a la educación. Reafirma la necesidad de garantizar una educación inclusiva e igualitaria, incluyendo la adquisición de competencias digitales, y destaca las múltiples barreras de género que impiden a las niñas el disfrute del derecho a la educación.
Es importante señalar que, en línea con la campaña de la EI “¡Por la pública! Creamos Escuela”, las conclusiones reclaman “inversión en la infraestructura y los sistemas de educación pública”. Ponen de relieve la necesidad de proporcionar acceso universal a la enseñanza primaria y secundaria gratuita y obligatoria, además de alentar a los Gobiernos a esforzarse por asegurar que todas las mujeres y las niñas completen la educación preescolar, primaria y secundaria, así como la ampliación de la formación profesional y técnica para ellas. Piden asimismo invertir en un acceso público a recursos de aprendizaje digital y la promoción de un entorno digital inclusivo, seguro y sensible a las cuestiones de género.
El documento reconoce que normas sociales negativas, estereotipos de género y barreras estructurales son algunas de las causas fundamentales de la persistente brecha de género respecto a la formación en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (CTIM), y que los responsables políticos tienen una responsabilidad a la hora de impulsar un cambio y establecer entornos educativos favorables.
Respecto a la enseñanza, el documento deja claro que las tecnologías digitales no pueden reemplazar la educación impartida en persona, sino que deberían utilizarse para mejorarla y complementarla. Se reconoce el papel crítico que tienen docentes y educadores, además de señalar “la importancia de reforzar sus capacidades, habilidades y competencias respecto al aprendizaje en línea y digital, brindándoles apoyo, incluso mediante la formación, dispositivos, material e infraestructura tecnológica que necesiten”, así como la importancia de fomentar estrategias de enseñanza con perspectiva de género.
Próximos pasos
El texto de las conclusiones aporta orientaciones a los Gobiernos y otros colectivos interesados en promover la igualdad de género en el contexto del cambio tecnológico, incluso a través de la educación. No obstante, la finalización de este texto constituye tan solo el primer paso; ahora estas conclusiones deberán traducirse en realidad mediante su implementación. Los sindicatos de la educación desempeñan un importante papel a la hora de defender la igualdad de género en y a través de la educación a escala local, nacional y global.