La Internacional de la Educación condena firmemente los ataques perpetrados contra los sindicatos libres por parte de las autoridades de Bielorrusia como parte de la larga campaña para destruir las fuerzas democráticas. El 18 de julio, el Tribunal Supremo liquidó y disolvió el Belarusian Congress of Democratic Trade Unions (BKDP) junto con sus cuatro organizaciones miembros, tres de las cuales son miembros del IndustriALL Global Union. Además, quince dirigentes y activistas sindicales se encuentran en prisión.
Diez de ellos, entre los que se encuentra el líder histórico de los sindicatos independientes del país, Aliaksandr Yarashuk, fueron detenidos el 19 de abril de 2022. Dos permanecen arrestados desde el 17 de agosto de 2020. A continuación, se enumera el listado de presos junto con su afiliación sindical:
- Aliaksandr Yarashuk – Presidente del Belarusian Congress of Democratic trade unions, BKDP.
- Siarhei Antusevich – Vicepresidente del BKDP.
- Hennadz Fiadynich – Vicepresidente del Radio and Electronic workers’ union, REP.
- Vatslau Areshka – Activista del REP.
- Mikhail Hromau – Miembro y secretario del Consejo del SPM.
- Iryna But-Husaim – Responsable del equipo de medios de comunicación del BKDP, contable del BKDP.
- Miraslau Sabchuk – Activista del SPM.
- Yanina Malash – Vicepresidenta del SPM, responsable de organización.
- Vitali Chychmarou – Miembro del Consejo del SPM, inspector de trabajo.
- Vasil Berasneu – Presidente en funciones del REP.
- Zinaida Mikhniuk – Vicepresidenta del REP.
- Aliaksandr Mishuk – Vicepresidente del BITU, presidente del BITU en el JSC Belaruskali.
- Ihar Povarau – Activista del BITU en la planta metalúrgica bielorrusa BMZ.
- Yauhen Hovar – Activista del BITU en la planta metalúrgica bielorrusa BMZ.
- Artsiom Zhernak – Presidente del SPM en la planta de automóviles de Minsk
Llamamiento de los sindicatos mundiales para la liberación de los sindicalistas detenidos
En mayo de 2022, la Internacional de la Educación se unió a otros sindicatos mundiales en un llamamiento para exigir la liberación de los 20 sindicalistas independientes detenidos el 19 de abril (algunos fueron liberados poco después de las detenciones). Asimismo, los sindicatos mundiales respaldan la actual campaña de LabourStart para obtener su liberación.
Aunque el presidente de Bielorrusia, Lukashenko, ha restringido de manera constante las libertades democráticas desde que fuera elegido por primera vez para ese cargo en 1994, la represión se intensificó tras las elecciones más recientes del 9 de agosto de 2020. De manera generalizada se consideró que los resultados habían sido fraudulentos y no transparentes. El anuncio de las cifras oficiales llevó a la calle a cientos de miles de personas y originó huelgas en las grandes empresas estatales. La respuesta de las autoridades fue una represión brutal y violenta contra toda forma de disidencia, la prensa independiente, los medios de comunicación y los sindicatos que no estaban bajo el control del gobierno. Se llevaron a cabo detenciones masivas, actos de tortura generalizados e incluso un secuestro patrocinado por el Estado a fin de capturar a un periodista independiente.
Una de las medidas adoptadas contra los periodistas fue la disolución de su sindicato de 1 300 miembros, el Belarus Association of Journalists (BAJ), afiliado a la Federación Internacional de Periodistas (FIP). El sindicato fue disuelto por el Tribunal Supremo por iniciativa del Ministerio de Justicia en agosto de 2021, un año después de las elecciones.
Bielorrusia, base para el despliegue de tropas rusas
A fin de aferrarse al poder a pesar de la abrumadora oposición pública, el presidente Lukashenko recurrió al fuerte apoyo del presidente ruso Putin y pagó el precio con la soberanía del país. La influencia rusa aumentó aún más con la invasión de Ucrania, y Bielorrusia se convirtió en una base para el despliegue de tropas rusas. Además de las tropas, Rusia ha comunicado que tiene la intención de transferir misiles Iskander-M a Bielorrusia. Estos misiles pueden transportar tanto armas convencionales como nucleares.
Poco después de la invasión rusa, la confederación sindical independiente de Bielorrusia, el BKDP, emitió el siguiente comunicado:
“Ninguna nación del mundo desea la guerra. Los pueblos ruso, ucraniano y bielorruso no son una excepción. Pocos pueblos del mundo han sufrido pérdidas tan terribles y sacrificado la vida de decenas de millones de sus ciudadanos en su historia como lo han hecho nuestros tres pueblos, pueblos que están tan cerca unos de otros. Y no hay manera de entender, justificar ni perdonar el hecho de que el gobierno ruso haya comenzado una guerra contra Ucrania. El hecho de que el agresor invadiera Ucrania desde el territorio de Bielorrusia contando con el consentimiento de las autoridades bielorrusas no tiene justificación ni perdón”.
El personal docente planta las semillas de la democracia en la juventud
El secretario general de la Internacional de la Educación, David Edwards, reafirmando el apoyo de la Internacional de la Educación a los sindicatos independientes de Bielorrusia y sus aliados en la lucha a favor de la democracia, declaró:
“La lucha de los sindicalistas libres de Bielorrusia por la democracia, a pesar de la disolución de sus sindicatos y el encarcelamiento de sus líderes, merece el respeto y el apoyo no solo del movimiento sindical mundial, sino de todas las personas que defienden las instituciones y los valores democráticos. Su valentía sirve de inspiración, pero también muestra lo difícil que resulta acabar con el deseo de libertad y solidaridad.
Los sindicatos solo pueden funcionar de manera plena y libre en las democracias. Las democracias no pueden estar completas sin los sindicatos. La Internacional de la Educación se une a los sindicatos independientes de todos los sectores en esa lucha común por el sindicalismo y la democracia.
Como docentes, seguiremos contribuyendo a esa lucha plantando las semillas de la democracia en la juventud a fin de que puedan resistir y resistan a los autoritarios dondequiera que se encuentren. Como expresó un docente y filósofo estadounidense, ‘La democracia tiene que nacer de nuevo cada generación, y la educación es su comadrona’”.