Gracias al rápido despliegue de acciones de control de epidemias por parte del gobierno, las escuelas en Taiwán permanecen abiertas aplicando medidas estrictas para evitar la infección. La National Teachers’ Association también reaccionó con rapidez, contribuyendo al esfuerzo para garantizar la seguridad de docentes y alumnos durante la pandemia de COVID-19.
Actualmente, el brote de la enfermedad de Coronavirus 2019 (COVID-19) se encuentra bajo control en el país, recalcó Li Ya-jing, vicepresidente de la National Teachers’ Association (NTA) y miembro del Comité Regional de la Internacional de la Educación. Por el momento, los únicos centros escolares que se han cerrado son aquellos donde se ha detectado contaminación por COVID-19.
El 2 de febrero, el Ministerio de Educación de Taiwán anunció que las escuelas permanecerían cerradas, y amplió las vacaciones de invierno dos semanas más para permitir que el suministro de prevención de epidemias llegara al país.
Respuesta rápida
Inmediatamente, la NTA comenzó a evaluar de qué manera afectaría el COVID-19 a docentes y a alumnos. Con el fin de mantener abiertas las escuelas priorizando al mismo tiempo la salud y la seguridad de los alumnos y del personal, el sindicato instó a los gobiernos de los condados y de las ciudades a que proporcionaran a todas las escuelas material antiepidémico, como alcohol, líquido desinfectante y termómetros digitales de infrarrojos frontales. Asimismo, el sindicato hizo hincapié en que el personal en primera línea que tomaba la temperatura de los alumnos se equipara con mascarillas protectoras.
En los casos en que los docentes deben quedarse en casa y aislarse, el sindicato exigió al gobierno que garantizara fondos para la incorporación de profesores sustitutos, con el fin de que el proceso de formación pueda continuar.