La Internacional de la Educación ha exigido a los gobiernos que se centren en la educación pública gratuita de calidad y en los docentes para alcanzar la sostenibilidad y la capacidad de resistencia a través de la educación.
Esta petición se llevó a cabo en la 20.ª Conferencia de Ministros de educación de la Commonwealth (CCEM) celebrada en Nadi (Fiyi) del 19 al 23 de febrero. Con la temática «Sostenibilidad y adaptación: ¿puede cumplir la educación?» como eje, los participantes debatieron formas de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y garantizar la capacidad de adaptación tanto en la Commonwealth como en otros países.
Progreso lento con respecto a los ODS
Susan Hopgood, Presidenta de la Internacional de la Educación (IE), recordó a los gobiernos en su intervención durante la inauguración del Foro de Socios Integrados de la CCEM que, casi dos años y medio después de su aprobación, los ODS de la ONU no se han traducido aún en acciones concretas en el ámbito nacional y local. Además, señaló que millones de niños y adolescentes quedan apartados del colegio y que los ignorados suelen ser jóvenes en zonas de conflicto, rurales o marginales, niñas, menores discapacitados, migrantes y refugiados, grupos indígenas y minorías étnicas.
Hopgood explicó que todavía debe conseguirse un progreso tangible en cuanto al compromiso con los ODS para reducir el calentamiento global. También describió el cambio climático como «la urgencia crítica de nuestros días» y pidió a los gobiernos que tomen medidas inmediatas para hacer frente a dicho problema.
«El avance hacia la aplicación del ODS 4 sobre la educación de calidad se ha visto obstaculizado por la falta de financiación adecuada, la escasez permanente de docentes, las infraestructuras inadecuadas y los recursos de enseñanza y aprendizaje insuficientes», condenó Hopgood.
Garantizar la capacidad de resistencia de sistemas, docentes y estudiantes
Hopgood indicó que, al analizar el término «resistencia», los participantes deberían evitar trasladar la responsabilidad de la gestión de fenómenos mundiales como el cambio climático, la radicalización, los conflictos y otros retos de los gobiernos a los ciudadanos.
«Esperar que las personas reciban los golpes y sean capaces de devolverlos gracias a su capacidad de resistencia sin tartar las causas estructurales y originarias de los desafíos que afectan a nuestros países, nuestras comunidades y sistemas educativos no solo sería injusto, sino que también supondría una negativa a la responsabilidad principal de los gobiernos», señaló.
Hopgood también propuso tres imperativos para conseguir los ODS, la sostenibilidad y la adaptación a través de la educación, es decir, sistemas educativos, educadores y estudiantes con capacidad de resistencia. Insistió en que los sistemas educativos resistentes, sostenibles e inclusivos son gratuitos y de financiación pública, por lo que los centros escolares privados con ánimo de lucro, incluidas las denominadas escuelas privadas low-cost, no son la panacea para una educación de calidad para todos.
Además, exigió a los gobiernos que empoderen a docentes y educadores a través de formación de alta calidad y oportunidades continuas para su desarrollo profesional, y que les concedan la autonomía profesional que necesitan para tomar decisiones relacionadas con la docencia y el aprendizaje.
Hopgood se mostró contraria a la estrechez de miras de numerosos gobiernos en cuanto a la competencia y la evaluación, y se lamentó de que esta suela inhibir la capacidad de los alumnos para resolver problemas, crear, innovar y adaptarse a situaciones nuevas.
Los gobiernos deben asumir la responsabilidad de la provisión de una educación de calidad gratuita para todos
En el ámbito de un panel de debate sobre responsabilidad en la educación como representante de la IE, Dennis Sinyolo argumentó que la educación es un derecho humano fundamental y un bien público cuya provisión debería estar garantizada por el estado. Propuso también medidas para garantizar que se ofrezca una educación pública y gratuita para todos. Dichas propuestas incluyen garantizar la recaudación de más aportaciones nacionales, acabar con los vacíos legales fiscales, luchar contra la corrupción y cumplir con los objetivos acordados internacionalmente en cuanto a financiación educativa.
El Grupo de Docentes de la Commonwealth, (CGT), una agrupación de organizaciones miembro de la IE pertenecientes a países de la Commonwealth, se reunió con motivo de la CCEM para debatir la Respuesta Global de la IE ante la privatización y la mercantilización de y en la educación, así como el marco propuesto por la IE sobre estándares docentes profesionales.