La grave escasez de docentes cualificados con una formación apropiada representa una amenaza para el logro de la Educación para Todos y los Objetivos de Desarrollo del Milenio para el año 2015, según un nuevo estudio realizado por la Internacional de la Educación.
El estudio sobre la oferta de docentes, su contratación y retención en 6 países subsaharianos de habla inglesa, Teacher Supply, Recruitment and Retention in 6 Anglophone Sub-Saharan African Countries, ha sido elaborado por Dennis Sinyolo, coordinador de la Unidad de Educación y Empleo de la IE, quien visitó Gambia, Kenia, Lesoto, Tanzania, Uganda y Zambia en el curso de su investigación. Se centra en cinco grandes temas: la oferta de docentes, las plazas no ocupadas, sus salarios y su motivación, así como su absentismo y la participación sindical en la formulación y el desarrollo de las políticas.
“Las conclusiones del estudio reafirman la necesidad de que la IE siga ejerciendo presión sobre los gobiernos, la UNESCO, el Banco Mundial, el FMI, UNICEF y otros organismos de la ONU y organizaciones para apoyar la formación y contratación de docentes cualificados. Sin ellos, no podremos proporcionar a las niñas y los niños del mundo entero el acceso a una educación pública de calidad y eficaz para todos”, afirma Fred van Leeuwen, secretario general de la IE.
El estudio revela que cuatro de los seis países estudiados experimentan una grave escasez de docentes cualificados, tanto en la enseñanza primaria como en la secundaria. Gambia, Lesoto, Tanzania y, en cierta medida, Uganda no han logrado suministrar una formación profesional apropiada para preparar a los futuros docentes con el fin de satisfacer la demanda, actual y futura. No han conseguido aumentar significativamente el número de docentes debido a consideraciones presupuestarias y los acuerdos concluidos con las instituciones financieras internacionales. La escasez de personal docente parece ser más grave en las zonas rurales alejadas y para impartir determinadas materias, como matemáticas y ciencias.
En lo que se refiere a la remuneración de los docentes, el estudio muestra que, por regla general, están por debajo de la línea de pobreza o del costo de vida. La situación es aún peor para los docentes no cualificados, cuya mayoría gana entre el 40 y el 60 % del sueldo más bajo que se paga a los docentes cualificados. Además, numerosas escuelas no les ofrecen una vivienda digna.
La tasa media de bajas vegetativas, es decir, plazas de docentes vacantes, es del 4% en los seis países. La mayor parte de las bajas vegetativas se debe a la jubilación, renuncia, fallecimiento y despido de docentes. Muchos de los encuestados consideran que los fallecimientos debidos a enfermedades relacionadas con el SIDA han contribuido en gran parte a las plazas de docentes que siguen sin ocuparse. La fuga de cerebros, principalmente a causa de los bajos salarios y las malas condiciones de servicio, también aumentan el elevado número de bajas vegetativas de profesionales de la educación.
Como resultado, la enseñanza se ha convertido en un mero escalafón para avanzar o en una profesión de último recurso en los seis países. Por ejemplo, en Tanzania, algunos docentes desaniman a sus propios hijos a optar por la enseñanza como actividad profesional. Existe una urgente necesidad de mejorar la situación de la docencia en los seis países con el fin de atraer a los jóvenes a la profesión y retener a los actualmente en servicio.
Este articulo fue publicado en Mundos de la Educación, No. 25, febrero/marzo 2008.