En respuesta a los datos publicados por los gobiernos estatales y federales, el Australian Education Union ha puesto de manifiesto la escasa financiación que existe para apoyar a los estudiantes con discapacidad.
En Australia, más de uno de cada ocho alumnos (el 12.5 por ciento) requiere un apoyo suplementario, sustancial o extensivo para atender una discapacidad o dificultad de aprendizaje. Este porcentaje representa más del doble de la cifra de personas que recibe apoyo financiado en las escuelas. Eso es lo que afirma Maurie Mulheron, Vicepresidente Federal del Australian Education Union (AEU), refiriéndose a la recién publicada Recopilación Coherente de Datos a Nivel Nacional sobre Escolares con Discapacidad (NCCD, por sus siglas en inglés) para 2015.
Esta cifra comprende el 13,6% de los alumnos de los centros públicos, que han formado sistemáticamente a una mayor proporción de alumnos con discapacidad que las escuelas privadas.
Prácticamente, más de 270 000 alumnos que requieren apoyo financiado no lo están recibiendo, denunció Mulheron. Este hecho “pone al descubierto años de inactividad por parte de un gobierno federal que no ha logrado cumplir su promesa electoral de financiar adecuadamente a los alumnos con discapacidad”.
Debemos actuar ya
Teniendo en cuenta que el gobierno federal ha estado al corriente de estos datos durante más de un año, y no ha hecho nada al respecto, Mulheron declaró que era “hora de actuar y de proporcionar a los niños con discapacidad el apoyo económico que necesitan para obtener buenos resultados académicos”.
“Cada año de retraso supone otro grupo de alumnos con discapacidad que se verá privado de un apoyo fundamental y de la posibilidad de sacar el máximo provecho a su educación”.
Los datos de la NCCD han sido respaldados por encuestas realizadas a padres de alumnos con discapacidad, así como por la encuesta “El estado de nuestras escuelas” llevada a cabo por el Australian Education Union, en abril de 2016. Esta última reveló que el 87 por ciento de los directores de centros escolares habían declarado tener que destinar fondos de otras partidas del presupuesto escolar para ayudar a alumnos con discapacidad, en comparación con el 84% de 2015.
Una promesa incumplida
Mulheron recordó la promesa electoral realizada por el gobierno federal en 2013 de financiar a todos los alumnos con discapacidad a partir de 2015. Dicha promesa fue reiterada más adelante por el entonces ministro de Educación Christopher Pyne, en junio de 2015, cuando declaró que, a partir de 2016, “todos los niños con discapacidad de Australia podrían recibir la ayuda adecuada requerida en función de su discapacidad”.
No obstante, en la actualidad, recalcó el líder del AEU, se ha notificado que dicha financiación no se facilitará hasta el año 2018 como muy pronto.