Los sindicatos de la educación de Reino Unido han acogido con satisfacción el anuncio realizado por la Secretaría de Estado para la Educación afirmando que se ha abandonado la Ley de Educación para Todos, que tenía por objeto obligar a todos los centros escolares situados en zonas de bajo rendimiento de autoridades locales a convertirse en academias.
NASUWT: Gran incertidumbre en torno a las reformas educativas
La National Association of Schoolmasters Union of Women Teachers(NASUWT) aplaudió esta medida. "La Secretaria de Estado, Justine Greening, ha vuelto a hacer gala de determinación al no seguir alegremente el camino trazado por sus predecesores y, en lugar de eso, dejar su propio sello sobre la futura orientación política que seguirá la educación, para bien o para mal”, sostuvo Chris Keates, Secretaria General de la NASUWT.
Todavía existe una gran incertidumbre y dudas acerca del alcance y el ritmo de las reformas del Gobierno, así como inquietud ante la futura financiación de las escuelas y el papel que desempeñarán las autoridades locales en la oferta educativa, explicó Keates.
Los ministros deben hacer balance de la situación actual y evitar que se agraven "los grandes problemas, especialmente en lo que respecta a la oferta de docentes, que han sido el resultado de los últimos seis años de reformas", afirmó ella.
NUT: La política educativa se encuentra en una situación de caos absoluto
El National Union of Teachers(NUT) puntualizó que estaba claro que la política educativa del Gobierno se encuentra en una situación "de caos absoluto... y los niños y los jóvenes son los que más sufren las repercusiones de este caos", según el Secretario General del NUT, Kevin Courtney.
Después de que los anteriores Secretarios de Educación "dieran marcha atrás de manera vergonzante con respecto a la ley de Educación para Todos", las amplias críticas han llevado finalmente al Gobierno a tomar la decisión de abandonar cualquier intento de revisar sus planes de llevar a cabo una academización total, declaró.
Greening debe empezar a escuchar a la profesión para poder encontrar una manera de proceder que garantice los mejores resultados educativos para todos los niños, señaló Courtney.
ATL: Una victoria para el sentido común
La Association of Teachers and Lecturers(ATL) también reaccionó ante la decisión del Gobierno. El Director de Estrategia Económica y Negociaciones de la ATL, Adrian Prandle, declaró que su sindicato "se siente aliviado de que el Gobierno haya decidido abandonar los planes de obligar a las escuelas a convertirse en academias”.
Por otra parte, Prandle subrayó que esta "victoria del sentido común" y "cambio de 180º", refleja que no existen pruebas que demuestren que las academias sean capaces de ofrecer una mejor educación para los niños o de mejorar los resultados educativos, así como la dificultad a la que ya se enfrenta el Departamento de Educación para garantizar que no se produzcan irregularidades financieras en las academias.
El Gobierno debe centrarse ahora en los retos reales que plantea la educación, tales como contratar y mantener a suficientes maestros cualificados, proporcionar bastantes plazas escolares y reducir la carga lectiva de los docentes, manifestó Prandle. Asimismo, debe asegurarse de que cualquier cambio que se realice en la financiación de las escuelas proteja a los niños desfavorecidos y tenga en cuenta los recortes de financiación en términos reales a los que se enfrentan los centros escolares, puntualizó Prandle.