Cuando los ciudadanos suizos acudan a las urnas el próximo 25 de septiembre tendrán la oportunidad de votar una iniciativa popular conocida como AHVplus, lanzada por los sindicalistas docentes, que tiene por objeto otorgar a los docentes un aumento de sus pensiones.
Dicha iniciativa, que conlleva unos costes adicionales relativamente modestos, tanto para los empleadores como para los empleados, ayudará a garantizar una pensión más elevada a largo plazo. El AHV es un seguro suizo de vejez y supervivencia, creado para proporcionar apoyo económico a las personas cuando ya no pueden trabajar debido a la vejez (pensiones), o cuando fallece la persona que garantizaba su sustento.
“Decir “sí” a la iniciativa AHVplus rectificará la tendencia según la cual los docentes y la mayoría de los empleados contribuyen cada vez más a los fondos de pensiones, pero reciben menos prestaciones de jubilación durante un período de tiempo más largo”, afirmó Franziska Peterhans, secretaria central del sindicato de docentes Dachverband Lehrerinnen Lehrer und Schweiz(LCH).
En lugar de reducir las pensiones y fijar la edad de jubilación a los 67 años, las empresas y el gobierno deben garantizar que se compensen las reducciones de las pensiones, declaró. De no ser así, un menor número de personas “podrá mantener su nivel de vida habitual de una manera adecuada” después de jubilarse con el dinero recibido por el AHV y los fondos de pensiones, en virtud de lo estipulado por la Constitución.
Una opción más segura
En 2014, el sindicato Dachverband Lehrerinnen und Lehrer Schweiz(LCH) junto con el Syndicat des Enseignants Romands(SER), ambos afiliados a la Internacional de la Educación (IE), presentaron conjuntamente con otras organizaciones la iniciativa popular AHVplus de la Unión Sindical Suiza (USS/SGB). Esta iniciativa solicita que se aumenten en un 10 por ciento las pensiones de AHV. Juntas, proponen financiar la iniciativa con el 0,4 por ciento del salario de los empleados y de los empleadores. Esto representaría un modesto coste adicional para los empleados: alrededor de 40 CHF (francos suizos) (38 €) al mes para un maestro de Primaria. De este modo, los trabajadores se beneficiarían de una pensión considerablemente más elevada. Un solo docente recibiría 200 CHF (€ 180) adicionales al mes, lo que supone 2 400 CHF (2 200 €) al año. En el caso de una pareja casada, el aumento de las pensiones sería de 350 CHF (en torno a 320 €) al mes o 4 200 CHF (3 800 €) al año.
Según los sindicatos, el AHV es el seguro de vejez más seguro y eficiente, puesto que, contribuyendo con una pequeña parte del salario (0,4 por ciento), y la misma aportación salarial por parte de los empleadores, todos recibirán una pensión significativamente mayor. “Ningún fondo de pensión puede conseguir esto”, señaló Peterhans.
Mayores contribuciones, menores beneficios
Las prestaciones de jubilación y los fondos de pensiones se han visto afectados debido, entre otras cosas, a la gran incertidumbre que rodea a los mercados financieros, puntualizó Peterhans. Los reveses que ha sufrido la bolsa de valores hacen necesario que los fondos de pensiones adopten medidas correctivas para compensar el déficit, puntualizó, insistiendo en el hecho de que la permanencia de unas tasas de interés bajas supone que no se obtenga prácticamente ningún rendimiento de las inversiones, lo cual se traduce en mayores contribuciones o en menores beneficios para los asegurados.