Una nueva encuesta publicada por el Times Education Supplement revela que el 77 por ciento de los docentes británicos que abandonaron la docencia se replantearía volver a las clases si los puestos a tiempo parcial o compartidos fueran una posibilidad.
El tiempo parcial es el nuevo tiempo completo. Esta es la opinión recogida por los nuevos datos del Times Education Supplement (TES), que ponen de manifiesto que unas modalidades de trabajo flexibles volverían a atraer a los antiguos profesores a la docencia. En efecto, la encuesta ha revelado que incluso la mayoría de los docentes que actualmente trabaja a tiempo completo preferiría ocupar un puesto a tiempo parcial o compartido.
Según la encuesta, aproximadamente uno de cada cuatro profesores ya trabaja a tiempo parcial. El 73 por ciento de los docentes que participaron en ella expresaron el deseo de mejorar la conciliación entre la vida profesional y personal, que constituyó el principal estímulo para querer trabajar a tiempo parcial. No obstante, la demanda de oportunidades flexibles es superior a la capacidad que tienen las escuelas para ofrecerlas.
Asimismo, el TES hizo referencia a los datos que sitúan a la enseñanza por detrás de otras profesiones en lo que respecta al apoyo del empleo a tiempo parcial. A partir de 2014, las estadísticas muestran que el 23 por ciento de los docentes trabajaba a tiempo parcial. Dichos datos no comprendían a los docentes auxiliares ni al personal de apoyo escolar, de los cuales el 85 por ciento y el 56 por ciento respectivamente trabajan actualmente a tiempo parcial.