Desarrollar estrategias para proteger los sistemas educativos públicos, reivindicar la profesión docente y fortalecer los sindicatos de docentes son las máximas prioridades del VII Congreso Mundial de la Internacional de la Educación en un año «muy importante para la educación».
En septiembre se aprobarán los nuevos Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU, que fijarán la agenda mundial de los próximos quince años. Esta semana la Internacional de la Educación, la mayor organización mundial de sindicatos de docentes, celebra su vii Congreso Mundial en Ottawa (Canadá), donde fijará su propia agenda para que la educación para todos se convierta en una realidad.
«Este congreso definirá los objetivos de los próximos cuatro años y, sobre todo, en el contexto de este año 2015, enviaremos un mensaje claro a los gobiernos», ha dicho la presidenta de la IE Susan Hopgood en sus declaraciones a los medios en Ottawa (Canadá).
Durante el congreso, que tendrá lugar del 22 al 26 de julio, los cerca de 2000 delegados que representan a sindicatos de docentes de 173 países debatirán y aprobarán políticas educativas y hablarán sobre el futuro de la profesión docente.
El secretario general de la IE, Fred van Leeuwen, ha dejado claro el objetivo general del congreso: «reivindicar la profesión docente en un mundo donde el valor de la enseñanza se ve amenazado por los métodos estandarizados y la comercialización». Van Leeuwen ha hecho hincapié en que «la educación es un derecho» y debe ser gratuita y accesible para que todos los niños tengan las mismas oportunidades de aprender.
Hopgood se ha centrado en los nuevos objetivos de la ONU, concretamente en el objetivo independiente de la educación cuyo fin es garantizar una educación de calidad, inclusiva y equitativa, y promover las oportunidades de aprendizaje permanente para todos. «Mientras haya un solo niño al que se le niegue el acceso a la educación, habrá demasiados», ha dicho.
La presidenta de la IE dirigió su atención a la importante cuestión de la financiación, necesaria para que puedan lograrse todos los objetivos. Ha dicho que «haciendo frente a la evasión fiscal se obtendrían 100.000 millones de USD», que se podrían utilizar para enviar a todos los niños a la escuela y alcanzar los objetivos mundiales de desarrollo.
Para más información sobre las políticas que se debatirán en el vii Congreso Mundial y para consultar el programa completo, visite la página web del Congreso aquí.