El 12 de diciembre cientos de docentes y empleados/as del sector público se lanzaron a la calle en una marcha organizada por el Union Coordination Committee (UCC) para protestar contra el hecho de que el Gobierno no haya sometido la nueva escala salarial para el sector público al Parlamento para su aprobación y exigir un aumento salarial.
Al dirigirse a los/las manifestantes reunidos/as a las puertas del Serail, el Palacio de Gobierno, Nehmeh Mahfoud, presidente del Teachers Syndicate of Lebanon (TSL), una de las afiliadas nacionales de la IE, dijo que los/las trabajadores/as del sector público no pueden continuar tolerando el retraso del Gabinete de Gobierno, que ya dura más de un año. La gente está cansada de falsas promesas.
Asimismo, advirtió que el UCC, que reúne a docentes de escuelas públicas y privadas, así como a funcionarios/as, paralizará las instituciones públicas cada vez que el Gabinete se reúna hasta que se satisfagan sus demandas.
En su discurso a los/las manifestantes, Hanna Gharib, presidenta de la Ligue des professeurs de l’enseignement secondaire public du Liban(LESPL), otra afiliada de la IE, dijo que, según la estrategia económica propuesta por el Gobierno, los/las empleados/as del sector público y los/las docentes de las escuelas públicas recibirían un aumento salarial diferente al de los/las docentes que trabajan en escuelas privadas.
Actualmente los/las docentes de las escuelas públicas disfrutan de las mismas condiciones con respecto al aumento salarial que los de las escuelas privadas.
“Esto pone en peligro la unidad de los/las docentes y divide el Union Coordination Committee”, lamentó Gharib.
Con respecto a un estudio que pide un aumento salarial a lo largo de un período de cinco años, añadió que socavaría el aumento en los próximos cinco años debido a la inflación.
El Gabinete dijo que no abordaría la escala de sueldos en su sesión del 12 de diciembre. Subrayó que la finalización del proyecto de normativa sobre la nueva escala de sueldos debería ir acompañada de medidas de reforma administrativa y financiera que tomen en cuenta los intereses de la gente y el estado de la economía nacional.
Los consejos económicos del país se oponen firmemente a la escala de sueldos y alegan que un aumento de salarios, si se aprueba, provocaría grandes pérdidas de puestos de trabajo tanto en el sector público como en el privado y tendría efectos catastróficos en la deuda pública del Líbano.
Empresarios, comerciantes y banqueros han pedido a las autoridades que rechacen cualquier plan que apoye un nuevo proyecto de ley relativo a la escala salarial o nuevos impuestos para financiarlo.
La nueva escala salarial para el sector público debe ser debatida en el Parlamento y financiada El UCC ha criticado continuamente a Mikati y lo ha acusado de manipular a docentes, aplazar la satisfacción de sus demandas y ejercer presión sobre el UCC a través de los consejos económicos.
Ha instado al Gabinete a imponer más impuestos sobre las propiedades en la costa para garantizar el financiamiento de salarios y limitar la corrupción en las instituciones públicas del Líbano.
Los/las funcionarios/as y docentes se niegan a hacer ninguna concesión en sus demandas. Para el UCC, el Gabinete es el único responsable de la paralización del país.
El UCC ya ha llevado a cabo varias huelgas para protestar contra el punto muerto en el que se encuentra el trabajo del Gabinete, ya que éste ya había aprobado la nueva escala de sueldos para funcionarios/as a principios de año.
Sin embargo, el Gabinete alega que está retrasando de manera deliberada esta cuestión para debatir en profundidad los planes para estimular los ingresos de Hacienda con el fin de cubrir los gastos que implica el aumento de sueldos.
El UCC ha prometido continuar con sus acciones en la calle hasta que se presente la nueva escala de sueldos al Parlamento y realizar manifestaciones cada semana hasta que el Gabinete satisfaga sus demandas.
“La IE insta a las autoridades libanesas a que presenten la nueva escala salarial para el sector público al Parlamento”, dijo Huda Khoury, coordinadora de la IE. “El Gobierno debe cumplir sus promesas y comprender que los salarios y condiciones de trabajo decentes para los/las docentes son fundamentales para garantizar una educación de calidad para todos en el Líbano”.