Los docentes de escuelas públicas de toda Uganda se unieron a una huelga masiva que tuvo lugar el 16 y 17 de julio en protesta por el fracaso del Gobierno para mejorar su bienestar y su situación, incluyendo un salario justo y decente
La huelga fue un éxito, dijo Teopista Birungi, miembro del Consejo Ejecutivo de la IE y Secretaria General del sindicato Uganda National Teachers Union (UNATU) afiliado a la IE.
“Hemos logrado parte de nuestros objetivos”, declaró. “El propósito de esta manifestación era comunicar nuestra postura y advertir al Gobierno del empeoramiento de las condiciones laborales de los docentes. Las cuestiones de los docentes vuelven a estar a presente en el programa y el Gobierno tendrá que escuchar.”
Luchando por un aumento justo
Durante los últimos meses los sindicalistas de la educación han estado luchando con el fin de lograr negociar colectivamente con el Gobierno un sistema parar aumentar los salarios de los educadores de tal forma que sea en la misma proporción que el coste de la vida en Uganda.
A pesar de su petición de un aumento del 100%, el Gobierno anunció el pasado mes de junio que no ofrecería más que un incremento salarial del 50% para los docentes, y que se haría paulatinamente a lo largo de un período de tres años como mínimo, con un aumento inicial del 15% para este año.
UNATU afirmó que un aumento salarial del 15% es insignificante en el contexto actual, donde la tasa de inflación en Uganda es del 30%. El nivel de vida de los educadores no va a mejorar, dijo el sindicato.
Petición al Parlamento
Los educadores han recibido el apoyo de padres, de Organizaciones No Gubernamentales y de la comunidad en general en su lucha por unas condiciones laborales decentes. El 17 de julio,la denominada Acción de los Ciudadanos por una Educación Pública de Calidad, una coalición de organizaciones de la sociedad civil, entregó una petición al Parlamento deUganda enumerando las reivindicaciones de los docentes.
La petición subraya que también está en juego una educación de calidad para todos los niños y las niñas – no sólo el salario de los docentes. Solicita asimismo al Gobierno y a las autoridades educativas de Uganda que examinen desde una perspectiva más amplia el debilitado sistema de la educación pública en el país.