El domingo, 10 de octubre, la comunidad LGBT de Serbia realizara la marcha del Orgullo de Belgrado. IE declara su apoyo y solidaridad con la marcha, y pide a las autoridades serbias a garantizar su seguridad.
Sera la primera vez desde 2001, que la comunidad LGBT de Serbia se reunirá en Belgrado para la marcha del Orgullo. "La libertad de expresión es un derecho de los sindicatos y las organizaciones de la sociedad civil, el cual debe ser garantizado para toda la ciudadanía –incluidos activistas lesbianas, gays y transexuales de Serbia. Todos tienen el derecho a vivir libres de discriminación o de la amenaza de acoso y agresión física", dijo Fred van Leeuwen, Secretario General de la IE.
En 2001, la marcha del orgullo en Belgrado terminó en enfrentamientos tras los ataques y golpes perpetrados por vándalos en contra de los manifestantes LGBT. Desde entonces la comunidad LGBT en Serbia no ha podido celebrar ninguna marcha debido a las graves amenazas de grupos de derecha y de fanáticos religiosos. En 2009 la marcha fue cancelada el día anterior a su realización, ante la falta de garantías de parte de la policía.
"Reconocer los derechos de la comunidad LGBT, en la práctica, hace parte del proceso democrático que necesita ser mejorado en Serbia. ¡Todas las organizaciones sindicales de docentes deberían apoyar la marcha del Orgullo LGTB de Belgrado y declarar su solidaridad con la comunidad LGBT!" ha declarado Branislav Pavlovic, presidente del sindicato de docentes Serbio TUS, una organización miembro de la IE.
"Ahora le corresponde a las autoridades Serbias aplicar esta ley: los líderes políticos deben declarar el derecho de la comunidad LGBT a manifestarse, y la policía debe investigar todo tipo de amenazas y garantizar la seguridad de sus participantes," dijo el secretario general de la IE.
En Varsovia, tras su prohibición desde 2005, el evento Europride"Libertad, Igualdad, Tolerancia", el primero en realizarse un país del Europa del Este, culmino con éxitos en julio de 2010. Los sindicatos polacos, el apoyo y la solidaridad de los sindicatos internacionales y europeos, jugaron un papel clave en este desarrollo. Es hora de actuar para garantizar los derechos a la libertad de reunión, expresión y asociación a la comunidad LGBT y sus simpatizantes en Serbia.