Durante el congreso nacional celebrado del 5 al 9 de abril en Buena Esperanza, los delegados del Botswana Teachers' Union (BTU) decidieron por votación unir sus fuerzas a las del sindicato de funcionarios públicos con el objetivo de convencer al gobierno para que aplique la ley sobre servicios públicos.
El tema del congreso fue "La solidaridad de las personas contra la pobreza y la opresión", y acogió a alrededor de 1000 delegados.
La Ley sobre servicios públicos fue aprobada por el parlamento y firmada por el Presidente Khama en diciembre de 2008, y su entrada en vigor estaba prevista para el 1 de abril de 2009. La ley hace fijos a todos los funcionarios y les da derecho a una pensión, además de equiparar las prácticas laborales, la seguridad laboral y la remuneración nacionales con las normas internacionales. Por otro lado, la ley introducirá mecanismos de negociación y abolirá el derecho de los empleadores a jubilar a los funcionarios según su voluntad. De acuerdo con la ley, todos los funcionarios que trabajen bajo la dirección de las autoridades locales y los gobiernos centrales trabajarán bajo un empleador. Ello significa que la Ley sobre servicios públicos tendrá prioridad sobre otras leyes por las que se rigen todas las profesiones públicas, como la profesión docente, en lo que se refiere a condiciones de empleo.
En su discurso a los participantes, el Secretario General de la IE, Fred van Leeuwen, hizo hincapié en la importancia de lograr una remuneración justa y unas condiciones laborales aceptables para la profesión docente:
"Los gobiernos deberían entender que la educación implica el derecho de los niños a aprender y el derecho de los docentes a enseñar. No se puede esperar que los docentes enseñen sin ofrecerles a cambio un salario y unas condiciones laborales decentes".
Pule Ramabya fue elegido como nuevo presidente del BTU junto con un nuevo Consejo Ejecutivo nacional, sustituyendo así a Japhta Radibe, que se retirará este año de la dirección del sindicato.