La OCDE ha publicado hoy, 23 de marzo de 2020, el volumen II del Estudio Internacional sobre la Enseñanza y el Aprendizaje (TALIS) 2018. La IE, que ha contribuido a la elaboración del estudio, acoge con beneplácito las conclusiones, que considera un fundamento sólido para los debates entre los sindicatos de la educación y los responsables de la formulación de políticas.
En este extenso estudio se examina el tema de “los docentes y los directores escolares como profesionales valorados”, y se presta especial atención a las cuestiones de promoción del prestigio y la posición de la profesión (capítulo 2); provisión de trabajos seguros, flexibles y gratificantes a los docentes y directores escolares (capítulo 3); fomento de la colaboración para mejorar el profesionalismo (capítulo 4); y empoderamiento de los docentes y los directores escolares (capítulo 5). En el lanzamiento también se incluye una guía para los docentes (en inglés) donde se abarcan los aspectos principales del informe.
En el prólogo, Andreas Schleicher, director de la Dirección de Educación y Competencias, resume algunos elementos esenciales del carácter profesional. Señala:“Un ‘profesional’ es alguien que es capaz de utilizar sus conocimientos expertos para tomar decisiones sobre su trabajo, que goza de autonomía para actuar conforme a esas decisiones y que contribuye al cuerpo de conocimientos profesionales. Esas decisiones y acciones se basan en un conjunto especializado de conocimientos y competencias, que provienen tanto de una formación de calidad como de la colaboración constante con colegas y otras partes interesadas. Para los docentes y los líderes escolares, el profesionalismo no solo conlleva un desempeño eficaz de su labor, sino también trabajar para mejorar sus competencias, colaborar con sus colegas y con padres y madres, y reflexionar creativamente sobre los retos que afrontan”.
Principales conclusionesAunque el promedio general de satisfacción del profesorado es muy positivo (90%), los resultados varían considerablemente entre países.
Por primera vez, en el TALIS se preguntó a los docentes sobre el estrés que padecen, principalmente gracias a la participación de la Internacional de la Educación. Concretamente, como consecuencia de la labor de la Internacional de la Educación, el TALIS incorporó dos conjuntos de preguntas que se centraban en las fuentes y los niveles de estrés que afrontan los docentes. El informe concluye que “el estrés agudo en el trabajo también está estrechamente relacionado con la satisfacción de los docentes en el trabajo y su intención de seguir enseñando: el 18% de los docentes declara que experimenta mucho estrés en su trabajo, y el 49% indica que el hecho de tener demasiadas tareas administrativas es una de las principales fuentes de estrés.
Uno de los aspectos de consenso entre los docentes es la percepción de que los salarios son demasiado bajos. También creen que la sociedad infravalora la labor del profesorado. En la mayoría de los países, los docentes piensan que los responsables de la formulación de políticas no valoran sus opiniones, aunque muchos creen que, aun así, pueden influir en la política. En el informe se indica que esto puede deberse a que los docentes ejercen influencia a través de sus sindicatos.
La Internacional de la Educación y sus intervenciones, a través del Grupo de Trabajo del Comité Sindical Consultivo de la OCDE sobre Educación y Competencias, han sido, según el propio informe, “muy importantes en la elaboración y la implementación del TALIS”. Además de la incorporación del factor del estrés, la Internacional de la Educación también instó a examinar los temas de colaboración y liderazgo de los docentes que se abordan en los capítulos 4 y 5.
Análisis de la Internacional de la Educación
El Secretario General de la Internacional de la Educación, David Edwards, acogió con beneplácito las conclusiones y señaló: “Los resultados del TALIS 2018 proporcionan un fundamento sólido para los debates entre los sindicatos y los responsables de la formulación de políticas sobre la base del valor y los valores de la profesión docente. Proporcionan la esperanza de que, con el tiempo, la situación de la profesión docente gozará de un mejor reconocimiento, tendrá mayor respeto y autonomía, y estará dotada de más recursos”.
En el análisis inicial de las conclusiones de la Internacional de la Educación se acoge con agrado el hecho de que los docentes que reciben trato de profesionales calificados y respetados están en el mismo centro de las propuestas de políticas del TALIS. Las propuestas del TALIS, ya sea sobre el adelanto profesional, la evaluación del docente o la retención de maestros en escuelas difíciles y, sobre todo, acerca de la reducción del estrés y la mejora del bienestar del profesorado, constituyen un marco de políticas positivas relativas a los docentes. El TALIS presenta un futuro optimista para la educación, construido sobre la base de políticas relativas a los docentes que, si los gobiernos las adoptan en colaboración con los sindicatos de docentes, garantizarán una educación de alta calidad para toda la población infantil y juvenil.