La Confederación Nacional de Trabajadores de Educación (CNTE), afiliada de la Internacional de la Educación (IE) en Brasil, ha convocado una importante huelga a nivel nacional en el sector de la educación para protestar contra las políticas del Gobierno de Bolsonaro. La central sindical de Brazil, la Central Única de los Trabajadores de Brasil (CUT), y otras organizaciones han anunciado que se sumarán a la acción y que el 18 de marzo será una jornada de huelga general por la educación y en defensa de los servicios públicos.
La educación ha sido uno de los sectores más afectados por las políticas neoliberales del Gobierno de Jair Bolsonaro. La huelga nacional en el sector de la educación fue convocada después de que el Gobierno de Bolsonaro anunciara nuevas medidas que reducirán la inversión pública en la educación, a pesar de que los niveles actuales ya son insuficientes. La restructuración propuesta del Fondo para la Educación Básica (FUNDEB) socavará la financiación del transporte y las comidas escolares, los libros de texto, la formación de profesionales de la educación y la construcción y la renovación de escuelas, entre otros programas.
Los/las trabajadores/as de otros sectores rápidamente se sumaron a los/las docentes sindicalistas después de que Bolsonaro hiciera una serie de declaraciones contra la democracia y anunciara que se promulgarán nuevas leyes que socavarán los derechos de los/las trabajadores/as, por ejemplo, la legalización del trabajo precario o la tributación por parte de personas desempleadas. Además, los planes del Gobierno de reformar el sector público anularán despiadadamente muchas de las victorias y los derechos de los/las trabajadores/as del sector público.
El Consejo Ejecutivo de la CNTE declaró que “los sucesivos recortes en los presupuestos destinados a las universidades e institutos federales, la investigación académica, la salud y la asistencia social comprometen la calidad de vida de la población, privan a las nuevas generaciones de un futuro prometedor y ponen al país en una situación de inseguridad generalizada en varias esferas, en particular la lucha contra epidemias y pandemias como la que estamos experimentando en estos momentos”.
En vista del brote de COVID-19 y debido a las preocupaciones en materia de salud pública que plantea, se han suspendido los actos públicos programados para el 18 de marzo. La huelga se llevará a cabo en escuelas y otros lugares de trabajo y se ha animado a los/las manifestantes a expresar sus inquietudes en línea.
Durante la reunión del Consejo Global Unions celebrada en Londres la semana pasada, los/las dirigentes de sindicatos mundiales que representan a más de 200 millones de trabajadores/as, incluido el Secretario General de la IE, David Edwards, enviaron un mensaje de solidaridad y apoyo a los/las compañeros/as de Brasil.