Bajo la bandera de "Estamos presentes. Luchamos. Votamos", más de 3 000 educadores y educadoras, profesionales de la salud y empleados públicos se reunieron en la convención bianual de la Federación Americana de Docentes (AFT) en Pittsburgh, Pennsylvania.
Durante la convención de cinco días celebrada la segunda semana de julio, la AFT sentó las bases para un movimiento sindical contundente para hacer frente a la reciente decisión del Tribunal Supremo en el caso Janus v. AFSCME y los ataques de la derecha contra los sindicatos estadounidenses.
Involucrar a las bases, defender la democracia, renovar el compromiso con los valores sindicales y ser activistas comprometidos, fueron algunos de los principales temas que se abordaron a lo largo de la convención.
Los delegados y las delegadas también consideraron y votaron resoluciones sobre una serie de cuestiones, como la adopción de medidas reinvindicativas para promover la educación pública, la lucha contra la austeridad y el aumento de la financiación de los servicios públicos, la lucha contra la deuda estudiantil y la creación de un sistema sanitario que elimine las desigualdades en materia de salud.
En su discurso a los delegados y delegadas representantes de los 1,7 millones de miembros, la presidenta de la AFT, Randi Weingarten, hizo un llamado a las bases, para que se mantenga activas y comprometidas, para mantener el sindicato fuerte en la era post- Janus y para defender la democracia y la justicia social.
Sindicatos luchando por la democracia
"Esta situación no es normal. No puedo mantenerme callada y ustedes tampoco... En este momento crucial debemos defender la democracia... Debemos ser un instrumento de veeduría de nuestra democracia, para que nuestra sociedad sea segura, hospitalaria, decente", afirmó en su discurso.
"El movimiento sindical de Estados Unidos es clave para defender la democracia. Los Gobiernos autoritarios invariablemente atacan a los sindicatos, tratan de debilitarlos, porque los sindicatos siempre abanderan la lucha por la democracia", añadió.
"Saben que los trabajadores ganan fuerza cuando están organizados", continuó Weingarten. "Y saben que a los trabajadores les va mejor cuando se unen en sindicatos."
Weingarten, que fue reelegida para otro mandato más, explicó que la decisión del caso Janus ha impulsado a las bases a unirse y volver a comprometerse con la AFT en cifras récord. Más de 530.000 miembros han vuelto a comprometerse con el sindicato, y la AFT ha alcanzado su nivel más alto de afiliación, con 1.755.000 miembros.
“Estoy cansada de que los políticos me digan qué debo hacer en mi escuela”
Además, los ataques a los sindicatos y el deterioro de las condiciones laborales en tantos sectores han motivado a casi 300 miembros de la AFT a presentarse como candidatos a diferentes cargos electos, con la esperanza de influir en las políticas que afectan a su profesión.
"Estoy cansada de que los políticos me digan qué debo hacer en mi aula. Estoy cansada de que los políticos no nos den mejores salarios, mejores sistemas de evaluación y más autonomía", dijo Johanna López, una educadora de la junta escolar de Orlando, Florida, a la convención.
"Estoy harta de rogar para que nuestros responsables electos nos atiendan. En vez de eso, me voy a presentar para ocupar sus puestos, y ustedes también deberían hacerlo. Los docentes deberían presentarse a las elecciones como candidatos, movilizar a sus comunidades, ofrecerse como voluntarios, ayudar a elegir a otros docentes y defender la dignidad de nuestra profesión", afirmó.
Problemas internacionales, solidaridad internacional
Durante el programa de la convención, el Secretario General de la Internacional de la Educación, David Edwards, moderó un debate, en el que participaron líderes sindicales de todo el mundo, sobre la amenaza global a las sociedades democráticas y los derechos humanos. El foro, convocado por la presidenta de la AFT, Randi Weingarten, y organizado por la Escuela de Educación de la Universidad de Pittsburg, se centró en el papel vital que desempeñan la educación pública, los servicios públicos y los movimientos sindicales en la defensa de los derechos humanos y la solidaridad mundial.
"Nuestra voz y nuestra autonomía profesional es crucial en esta época de auge del nativismo, la xenofobia, el racismo y los ataques a las instituciones democráticas, a la libertad de prensa e incluso el desprecio y la negación de la ciencia, ", explicó el Secretario General de la Internacional de la Educación, David Edwards.
"Todos ustedes, en todo el mundo, tienen un papel que cumplir. Desde Polonia, Palestina, Turquía y Zimbabwe, estamos defendiendo nuestros valores más básicos", añadió Edwards. "Desde nuestras aulas, nuestros sindicatos, en las calles y con nuestros votos. Nos haremos oír, nos levantaremos y usaremos nuestra voz colectiva en favor de la justicia social para nuestros estudiantes, nuestras escuelas y nuestras comunidades.
"Son malos tiempos para ser docente o sindicalista"
Entre otros prominentes invitados que se dirigieron a la convención destacan Hillary Clinton, la senadora Elizabeth Warren y el senador Bernie Sanders.
Hillary Clinton, que recibió el Premio a los Derechos de la Mujer de la AFT, animó a las delegadas y delegados a "seguir adelante". “Sigan protestando. Sigan hablando a favor de la educación pública. Sigan hablando en contra de la violencia con armas".
"En esta era de ‘hechos alternativos’, sigan defendiendo la verdad, las pruebas, la razón. Sigan educando a nuestra próxima generación de ciudadanos y ciudadanas. Y sí, sigan postulándose para cargos de todos los niveles. Sobre todo, sigan defendiendo un país en el que todos los niños y niñas tengan una educación de primera, en el que tengan la oportunidad de ser todo lo que puedan ser", añadió.
La senadora Warren dijo que, a pesar del panorama político actual, tenía esperanza " porque en todo el país, los docentes se están alzando, hablando claro y luchando por el futuro de este país". Estas luchas son posibles gracias a sindicatos como la AFT, añadió. "No se equivoquen, los sindicatos construyeron la clase media de los EE.UU. y los sindicatos reconstruirán la clase media de los EE.UU.".
"Son malos tiempos para ser docente o sindicalista", dijo el senador Bernie Sanders a los delegados y delegadas de la convención, el domingo por la mañana, pero "si nos levantamos y luchamos, si educamos y nos organizamos, si demostramos el coraje y la unidad que requiere este momento de la Historia, no tengo ninguna duda de que vamos a ganar y traer un hermoso futuro a nuestro país".
Líderes de otros sindicatos se unieron como muestra de unidad y determinación. El presidente de AFSCME, Lee Saunders, la presidenta de NEA, Lily Eskelsen García, y la presidenta de SEIU, Mary Kay Henry, sirvieron de inspiración a los y las activistas, que seguirán cuidando, luchando y asistiendo a las trabajadoras y los trabajadores en todo lugar.