El tercer Congreso de la Internacional de la Educación reunido en Jomtien, Tailandia, del 25 al 29 de julio de 2001:
1. Considera que el uso de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (NTIC) en la educación y la formación va a extenderse, como ya es el caso en la mayoría de los otros sectores profesionales;
2. Considera que su uso va a crear oportunidades para un acceso más amplio y diversificado al saber y, al mismo tiempo, poner al personal y los sindicatos ante mayores desafíos. Las NTIC deben ser el medio para mejorar la educación y fortalecer los derechos sindicales al facilitar el acceso a la información y a la democracia;
3. Nota que, en la situación actual, el uso de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (NTIC) en los sistemas tradicionales de formación y de educación, o fuera de ellos, desarrolla desigualdad en términos de acceso, no sólo entre países en vía de desarrollo y países industrializados, sino también dentro de estas dos categorías de países entre grupos sociales favorecidos y desfavorecidos;
4. Subraya que está en la naturaleza del movimiento sindical tener en cuenta todos estos desafíos y definir las estrategias apropiadas para hacer de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (NTIC) un instrumento de democratización para un acceso a una «educación pública de calidad para todos ». Los docentes deben mantener el papel fundamental en el aprendizaje, que consiste en enseñar conocimientos y educar para la ciudadanía. Este nuevo aprendizaje necesita desarrollar la investigación en educación para explorar y analizar los diferentes modos pedagógicos de usar las NTIC. Se debe asociar a los docentes con esta investigación de manera que puedan beneficiarse de sus resultados;
5. Subraya que la exportación y la comercialización virtuales de la educación, especialmente a nivel de la enseñanza superior, han abierto un enorme mercado a inversionistas ambiciosos, que el ámbito político y económico actual sólo puede favorecer;
6. Subraya también que los enormes retos financieros de la comercialización del saber plantean el problema de la propiedad intelectual y de la concepción cualitativa, de la producción y de la difusión de programas informáticos, con el riesgo de la existencia de monopolios de e-aprendizaje en detrimento de la diversidad cultural de nuestra sociedad;
7. Subraya por fin que la oferta cada vez más importante y diversificada de cursos de educación y de formación por Internet plantea lógicamente la cuestión de la calidad de éstos y la acreditación de certificados obtenidos por las personas que los siguen;
8. Subraya que para un aprendizaje digital eficaz serán necesarios más docentes con mayor cualificación de la que se requería hasta el momento, lo cual tendrá implicaciones en lo que se refiere a la oferta de capacitación y el apoyo;
9. Subraya que la educación pública debe desempeñar la función de dar a los docentes instrumentos profesionales (producción y difusión de programas informáticos) inspirados en verdaderas elecciones educativas y pedagógicas;
El Tercer Congreso Mundial de la IE:
10. Pide que todos los docentes y personal de apoyo a la educación reciban una formación adaptada al uso de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación (NTIC) y que todos los establecimientos escolares estén progresivamente conectados gratuitamente a Internet con las seguridades y restricciones de acceso (filtros, "firewall", etc.) necesarias para un uso esencialmente pedagógico. La dimensión colectiva de las NTIC y el papel del trabajo en equipo de los docentes deben ser tomados en cuenta en esta formación;
11. Acredita al Consejo Ejecutivo para llevar a bien las conversaciones necesarias con la UNESCO, otros organismos relevantes, la OCDE y los gobiernos para que la concepción, la producción y la difusión de programas informáticos educativos estén suficientemente diversificadas con el fin de asegurar la diversidad cultural necesaria a la comprensión internacional;
12. Acredita al Consejo Ejecutivo para llevar a cabo las discusiones necesarias con la UNESCO, otros organismos relevantes, la OCDE y los gobiernos para que la educación no sea considerada una mercancía, y que los acuerdos y principios culturales intergubernamentales de la UNESCO prevalezcan sobre las reglas comerciales de la OMC en el intercambio de los servicios educativos;
13. Acredita al Consejo Ejecutivo para que defienda enérgicamente el suministro y el uso de programas informáticos educativos, con el fin buscar formas de suministrar productos informáticos comerciales a precios asequibles para los países en desarrollo y de alentar una mejor distribución del conocimiento para todos y todas;
14. Acredita también al Consejo Ejecutivo para defender los intereses del personal docente con relación a las condiciones de trabajo, las oportunidades de carrera y los derechos de propiedad intelectual, y para desarrollar códigos de buenas prácticas relacionados con estos temas;
15. Acredita al Consejo Ejecutivo para emprender las acciones necesarias destinadas a determinar los efectos de las tecnologías, particularmente los riesgos potenciales para la salud y la seguridad de los niños y niñas, y también sus efectos sobre el entorno educativo de los niños más pequeños;
16. Acredita al Consejo Ejecutivo y a sus organizaciones miembro para apoyar investigaciones en el ámbito nacional e internacional sobre los efectos educativos, sociales y económicos que tienen los desarrollos tecnológicos en la educación y las condiciones de trabajo de los docentes;
17. Acredita por fin al Consejo Ejecutivo para que lleve a bien las acciones necesarias con el fin de que las autoridades públicas aprovechen esta revolución tecnológica para asegurar una distribución justa de la información y del saber y para llevar a bien ante las organizaciones de la sociedad civil las actividades necesarias de sensibilización sobre las grandes oportunidades que ofrece esta revolución y también sobre los desafíos que plantea para garantizar en el tercer milenio una «educación pública de calidad para todos ».