El sindicato nacional de docentes de Kenia (KNUT), afiliado a la IE, ha condenado la oleada de violencia contra los/las docentes desatada tras la publicación de los resultados de los exámenes nacionales del KCPE, Certificado de Educación Primaria de Kenia.
En los días que siguieron a la publicación de los resultados, a finales de diciembre de 2011, una serie de noticias salieron a la luz sobre padres que habían amenazado, agredido, y echado a los/las docentes de sus aulas en las escuelas que habían obtenido malos resultados. Varios/as docentes se encuentran en el hospital con heridas graves. Diversas escuelas han cerrado sus puertas. Aún respetando el derecho de los padres a expresar su descontento con el resultado de los exámenes, la violencia contra los profesores y profesoras no es una respuesta legítima o aceptable.
El Secretario General de KNUT, David Okuta Osiany, llamó a la policía para que protegiese a los/las directores y docentes. Dº Osiany calificó de “brutal” el comportamiento iracundo de algunos de los padres.
“Cuando los padres van a las escuelas con armas y palos para golpear a los/las docentes, entonces se deben establecer algunas medidas de seguridad para proteger a los/las educadores”, Osiany subrayó. “Como funcionarios públicos, se debe garantizar la seguridad de los/las educadores. Las escuelas se han convertido en lugares inseguros cuando salen a la luz los resultados de los tests y los padres no están satisfechos con éstos.” Osiany destacó que existen muchas razones no relacionadas con el trabajo de los/las docentes por las que un/a estudiante suspende los exámenes.
Cada año, escuelas, condados y estudiantes son clasificados de acuerdo con las notas que sacan los/las alumnos/as en los exámenes. Los/las estudiantes con mejores notas son candidatos/as para ingresar en institutos nacionales de secundaria, los cuales cuentan con las instalaciones de mayor calidad educativa. Los/las estudiantes con menor puntuación pueden inscribirse en escuelas de provincia, mientras que los/las alumnos con la menor puntuación son candidatos a escuelas del distrito con escasos recursos.
Osiany criticó el sistema educativo: “No queremos que se clasifiquen las escuelas. Las escuelas deberían tener las instalaciones adecuadas y ser capaces de seguir el mismo currículo en todas partes. Pero la provisión de instalaciones no es equitativa y no es posible proporcionar el mismo servicio de calidad en tales circunstancias. En las zonas más alejadas, encuentras escuelas que jamás han visto ni tan siquiera un laboratorio.”
También explicó que este sistema presiona demasiado a los/las docentes y a los/las estudiantes, presión que puede resultar mortal. Desde que se conocieron los resultados, los medios de comunicación de Kenia han informado de que un director y dos estudiantes se han suicidado, al parecer debido a los exámenes.
La policía en el condado de Narok tristemente ha confirmado que el director de la Escuela Primaria Kalyet, Geoffrey Kiplang'at Sigei, se quitó la vida después de que los resultados de la escuela fuesen anulados por el Consejo Nacional Examinador de Kenia, debido a irregularidades. Antes de suicidarse, Kiplang'at Sigei, huyó tras conocer que todos/as sus 38 candidatos/as no habían podido obtener un resultado ya que las notas de Inglés y Kiswahili fueron anuladas. En otra explosión de violencia, los padres encolerizados de la Escuela Primaria de Matiolo irrumpieron en la escuela y atacaron al director, Juma Shirovere. Este incidente interrumpió el aprendizaje en la escuela para el resto del día.
Sin embargo, el delegado del Área de Educación, Luke Chebet, defendió a los/las docentes y culpó a los padres por no cooperar con estos últimos. Explicó que la Escuela Primaria Matioli obtuvo malos resultados porque los padres no se aseguraban de que sus hijos e hijas asistiesen a clase.
Chebet comentó que “ocho alumnos/as de una clase sólo aparecieron por la escuela para registrarse como candidatos/as al KCPE a principios de año y desaparecieron, para reaparecer dos días antes del examen.”
En la Escuela Primaria Makamini, el director, Seif Ngao Gonzi, fue atacado por varios padres que le acusaban de contribuir a los malos resultados de la escuela.
Gonzi achacó los malos resultados a la mala actitud de los padres y a la escasez de docentes, lamentando el hecho de que la escuela sólo tuviese seis docentes para 700 estudiantes. También hizo mención a los matrimonios precoces y a los embarazos entre las chicas: en el último día del examen KCPE, dos estudiantes oficialmente legalizaron sus matrimonios, y cinco chicas, cuatro de ellas candidatas a los KCPE, se quedaron embarazadas durante el curso.
Las trampas de los/las estudiantes constituyen otra preocupación de los/las educadores, en relación con los resultados de los exámenes. En el KCPE del año pasado, 334 centros examinadores informaron de que se hicieron trampas. A unos 7.974 candidatos/as, de entre 776.214 que hicieron el examen, les anularon sus resultados; el peor récord en la historia del KCPE.
El sindicato KNUT indicó que escribiría a la Comisión Nacional del Servicio Docente, instándoles a que garanticen la seguridad de los/las educadores. Reiteró que los/las docentes no deben ser considerados los únicos responsables del fracaso de los/las estudiantes en un examen a nivel nacional.
El Secretario General de KNUT pidió a los padres, a los comités escolares y a la comunidad en su totalidad que asuman la responsabilidad cuando sus escuelas obtienen malos resultados: “¿Por qué los/las docentes tienen que pagar los platos rotos cuando todo el mundo está involucrado?” El Primer Ministro de Kenia, Raila Odinga, también ha condenado los ataques a los/las docentes por los resultados en el KCPE. El Primer Ministro expresó que los/las docentes deben ser tratados con dignidad y que los demás interesados del sector educativo, incluida la Comisión de Servicios Docente, el Ministerio de Educación y los/las propios/as estudiantes, también tienen un papel que desempeñar.
La Coordinadora Principal de la región de África de la IE, Assibi Napoe, declaró: “La IE condena la violencia contra los/las docentes. Reitera que la violencia nunca fue y nunca será la solución a los conflictos y problemas a los que se enfrenta la sociedad. ¡La educación de calidad lo es!” Assibi Napoe instó a los padres a trabajar conjuntamente con el personal educativo, incluidos los/las directores/as, para garantizar la calidad educativa de sus hijos/as. Continuó haciendo un llamamiento a las autoridades keniatas para garantizar la seguridad de los/las educadores y de los/las estudiantes. Añadió que el Ministerio de Educación debe, junto con los sindicatos, cambiar este injusto sistema de evaluación.