El estado de Río Grande del Sur está bajo el agua. Según los últimos informes publicados por la Defensa Civil del estado, a las 12 del miércoles (8), 417 de los 497 municipios de la zona informaron problemas debido a las inundaciones de los últimos días. En total, 1.456.820 habitantes sufrieron afectación. Alrededor de 163 mil personas están desalojadas y 66.761 se encuentran en refugios. Entre las víctimas de las tormentas que golpearon la región, también hay docentes y personal de apoyo educativo que abandonaron sus hogares y ahora necesitan ayuda para recuperarse.
Según la última actualización, 128 personas siguen desaparecidas y el número de muertes confirmadas ha aumentado a 100.
Además de las pérdidas, varios puntos del estado enfrentan problemas de suministro de energía, internet, agua e incluso alimentos. En educación, 855 escuelas fueron afectadas por las tormentas en 228 municipios. Se estima que las inundaciones han afectado a 293,5 mil estudiantes. 421 instituciones educativas resultaron dañadas y 68 están sirviendo como refugio para los habitantes desalojados.
Solidaridad regional
El Comité Regional de la Internacional de la Educación América Latina (IEAL), publicó un comunicado en el que se solidarizó con la Confederación Nacional de Trabajadores de la Educación de Brasil (CNTE) y con la población de Rio Grande del Sur. El comunicado lamenta las muertes, las perdidas materiales, la afectación a comunidades indígenas. Además, el Comité Regional señala el papel de la crisis climática en la tragedia e insta al sector público a fortalecer al inversión pública destinada a luchar contra la crisis climática.
“Reafirmamos nuestro compromiso con la solidaridad sindical y recordamos la importancia de la educación como un catalizador en la lucha contra la crisis climática como ha establecido la Internacional de la Educación en su campaña Educar por el Planeta”, concluye el comunicado.
La situación en Río Grande del Sur
En entrevista con el sitio web de la CNTE, la presidenta del Centro de Profesores del Estado de Río Grande del Sur (CPERS, afiliada a la CNTE), Helenir Aguiar Schürer, proporcionó detalles sobre la situación en el estado y cómo brindar ayuda.
- Situación actual del estado y abastecimiento de la población. En Porto Alegre, gran parte de la ciudad sigue sin agua y muchas áreas carecen de energía. Aunque las aguas han descendido lentamente, se esperan más lluvias. En la región sur del estado, las inundaciones están afectando a áreas como São Borja y Uruguaiana. Existe preocupación por el aumento del nivel de las lagunas, que podrían fusionarse.
- Ayuda proporcionada por el CPERS a las personas afectadas. El sindicato alberga a 19 personas en su sede, que no pueden regresar a sus hogares debido a las inundaciones. Aunque la sede está sin energía, la conexión a internet ha vuelto. Se están monitoreando constantemente las necesidades de agua potable y se están organizando esfuerzos para brindar ayuda.
- Impacto en el personal educativo. Muchas personas afiliadas al sindicato han sufrido pérdidas significativas. En ciudades como Eldorado do Sul y Guaíba, algunas han perdido todo. Se espera que la magnitud total de las pérdidas se conozca una vez que las aguas retrocedan.
- Situación de las escuelas. Las clases se han reanudado en municipios no afectados, pero en áreas inundadas, algunas escuelas están sirviendo como refugio. En la región metropolitana, incluyendo Porto Alegre, las clases aún no han vuelto. Se está evaluando la situación diariamente en áreas como Rio Grande, donde las inundaciones persisten.
- Campañas de solidaridad y donaciones. El CPERS está colaborando con campañas de la CNTE y la CUT. Se necesitan donaciones de ropa abrigada, mantas, toallas, alimentos, agua potable y artículos de higiene personal. También se destacan los desafíos de limpieza y prevención de enfermedades una vez que las aguas retrocedan.