En diferentes lugares de África se organizaron varios eventos el 5 de octubre con motivo del Día Mundial de las y los Docentes (WTD) para reconocer la labor crucial del profesorado, que ofrece a la juventud del continente una educación de calidad y un futuro pacífico y sostenible. Los gobiernos africanos deben invertir en docentes y proporcionarles motivación y apoyo.
En el evento de conmemoración del WTD de la Región/África celebrado en Abiyán (Costa de Marfil) con organización conjunta con la UNESCO, African Union (AU) y UNICEF, el doctor Dennis Sinyolo, director de la Oficina Regional de la IE para África (EIRAF), señaló que «las condiciones laborales y los salarios precarios han destrozado la dignidad del profesorado africano. Vemos con buenos ojos las recomendaciones del Panel de Alto Nivel de Naciones Unidas sobre la Profesión Docente que piden a los gobiernos que solucionen la escasez mundial de docentes y restablezcan la dignidad de la profesión ofreciendo financiación a largo plazo para un profesorado con una cualificación y un apoyo adecuados».
El plan de cinco puntos de EIRAF para revitalizar la profesión docente en África
A continuación, se propuso un plan de cinco puntos para revitalizar la profesión docente en África en el que exigían a los gobiernos africanos que:
- Formen y contraten a un número adecuado de docentes cualificados. El alumnado tiene derecho a contar con docentes bien formados, con cualificación profesional, apoyo y motivación.
- Confíen y respeten al profesorado concediéndoles la autonomía y libertad profesional que necesitan para enseñar de una forma creativa, colaborar y llevar a cabo labores de investigación.
- Conviertan la docencia en una profesión atractiva y en la primera opción para garantizar unos salarios y condiciones laborales decentes para el profesorado.
- Impliquen al profesorado en un diálogo social y sobre políticas auténtico e institucionalizado a través de sus sindicatos.
- Inviertan en educación y profesorado alcanzando los estándares de financiación de la educación acordados internacionalmente, que implican asignar al menos el 20 % del presupuesto nacional o un mínimo del 6 % del Producto Interior Bruto a la educación.
Después de señalar que, a través de la campaña actual «¡Por la pública! Creamos escuela», la IE seguirá presionando a los gobiernos africanos para que ofrezcan una educación pública de calidad para todos y todas, el doctor Sinyolo incidió que debe ser «una educación de calidad impartida por un profesorado bien formado, con cualificación profesional, en el que se confíe, que esté motivado y cuya labor se valore y apoye».
Ceremonia de premios para docentes del continente de African Union
La labor de ocho docentes procedentes de Ghana, Kenia, Malawi, Mauritania, Isla Mauricio, Marruecos, Nigeria y Sudáfrica se reconoció durante la ceremonia de premios al profesorado y el seminario web sobre la profesión docente de African Union (AU).
Monica Idinoba, de AU, en nombre del profesor Mohammed Belhocine, comisionado para Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación de AU, pronunció unas palabras de bienvenida en las que recordó que «la transformación de la educación empieza por el profesorado» y «todas las profesiones se desarrollan a través de la docencia».
También afirmó que el desarrollo del profesorado es una prioridad clave de la Estrategia Continental de Educación para África (CESA) 2016-25.
Además, señaló que, aunque en África se han logrado avances importantes en cuanto al acceso a la educación, sigue habiendo brechas en y entre países africanos: «Si no se actúa para transformar la educación, los objetivos establecidos por la CESA, la Agenda de la AU para 2063: La África que queremos, y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU no se cumplirán, hecho que afectará a largo plazo al aprendizaje del alumnado y a diferentes aspectos del desarrollo humano en el continente».
Para Roland Kobia, embajador de la Unión Europea (UE) en Etiopía y antiguo docente, «el profesorado es la base de los sistemas educativos» y «el COVID nos demostró la resistencia y la capacidad de adaptación que tienen los sistemas».
Además, añadió que cuando renovaron su colaboración, la EU y AU reafirmaron que la educación era una de sus prioridades conjuntas.
«La huella que deja el profesorado en la mente de los niños y niñas tiene un valor incalculable y un impacto que perdura a lo largo de sus vidas», concluyó.
Quentin Wodon, director del Instituto Internacional de la UNESCO para el Fortalecimiento de Capacidades en África (IICBA), también destacó que su organización presentó el 5 de octubre una Guía de formación regional para reforzar la salud mental y el apoyo psicosocial (MHPSS) para docentes de África antes y durante el desarrollo de su labor.
Afirmó que la guía de formación demuestra que el estallido de la pandemia de COVID-19 afectó negativamente a docentes, personal de formación de docentes, y el alumnado y todo el sistema educativo se vio afectado, por lo que se incrementaron los problemas psicológicos, como la depresión, la ansiedad, la frustración y el estrés.
Como institución cuya misión es empoderar al profesorado para que todo el alumnado progrese, mantenemos un compromiso con reforzar la salud mental y el bienestar psicológico del profesorado del continente africano. Sin duda, los y las docentes constituyen los cimientos de una educación de calidad; por tanto, su bienestar es clave para conseguir mejores resultados educativos», reconoció.