El pasado 8 de enero se inició la aplicación del refuerzo de la vacuna contra el COVID a trabajadores y trabajadoras de la educación en México.
El secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Alfonso Cepeda Salas, expresó que el sindicato valora el reconocimiento del docente como figura esencial para garantizar la realización del derecho fundamental a la educación de cada niño y niña. Cepeda Salas confió en que, con el refuerzo de la vacuna y las medidas sanitarias pertinentes, el cien por ciento del alumnado acuda a las clases presenciales en 2022.
Desde el inicio de la pandemia, la Internacional de la Educación ha exhortado a todos los países a priorizar a trabajadores y trabajadoras de la educación en sus planes nacionales de despliegue de vacunas contra la COVID-19, con miras a garantizar que la educación continúe de manera segura y que las escuelas permanezcan abiertas.
Para ello, la primera condición es que se garantice un acceso equitativo a las vacunas en todos los países. La Internacional de la Educación (IE) ha pedido a la Organización Mundial del Comercio que suprima temporalmente las barreras de la propiedad intelectual para impulsar la producción de vacunas, es decir, que aplique la exención del Acuerdo sobre los ADPIC. En palabras del Secretario General de la IE, David Edwards: “Equidad y liderazgo son necesarios para poner fin a la historia de la COVID. Nadie estará protegido hasta que lo esté toda la población.”