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Nacionalismo de las vacunas y especulación con la crisis: los sindicatos toman medidas

publicado 12 marzo 2021 actualizado 9 junio 2021
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“Solo 10 países, algunos de los más ricos del mundo, han administrado el 75 % de las vacunas. Mientras tanto, alrededor de 130 países que suman 2,5 millones de personas no han administrado una sola dosis. Este no es un tema sobre el que podamos permitirnos mantenernos pasivos. La única solución a una pandemia mundial es la solidaridad mundial”, afirmó David Edwards, secretario general de la Internacional de la Educación, en la inauguración del webinario llevado a cabo por la IE sobre la equidad en las vacunaciones.

El evento reunió a más de cien líderes sindicales y representantes de todo el mundo, así como a expertos de la Organización Mundial de la Salud y de la Unesco, con objeto de debatir sobre la situación del lanzamiento a nivel mundial de las vacunas contra la COVID-19 y sus repercusiones para los docentes y el personal de apoyo educativo. Los participantes pusieron de relieve las graves consecuencias del nacionalismo de las vacunas y los enfoques lucrativos sobre la crisis médica y enfatizaron el papel de los sindicatos de la educación a la hora de impulsar acciones para lograr un acceso equitativo a las vacunas de la COVID-19 para todos.

Qué no hacer en una pandemia: nacionalismo de las vacunas y especulación con la crisis

Dado que unos pocos países de ingresos altos acaparan la mayor parte del suministro mundial de vacunas disponible hasta la fecha, resulta fundamental aumentar su producción en todo el mundo a fin de garantizar un acceso equitativo. Con este fin, Sudáfrica y la India han presentado una propuesta a la Organización Mundial del Comercio (conocida como la “propuesta de exención de los ADPIC”) para levantar temporalmente las barreras de propiedad intelectual sobre las vacunas contra la COVID-19 y los productos médicos y hacer posible aumentar su fabricación en todo el mundo. Alrededor de dos tercios de los miembros de la Organización Mundial del Comercio apoyan la propuesta de exención de los ADPIC, pero muchos de los países más ricos e influyentes se han posicionado del lado de las grandes farmacéuticas y protegen los beneficios en medio de una pandemia mundial.

Al abordar el nacionalismo de las vacunas y el proteccionismo de la propiedad intelectual, Annie Sparrow, asesora del director general de la Organización Mundial de la Salud, declaró que “ningún país puede lograr la inmunidad contra la COVID-19. Cuanto más se reproduzca el virus, dondequiera que se encuentre, más nos seguirá poniendo a todos en peligro. Debemos hacer todo lo posible para aumentar la producción mundial de vacunas. Debemos poner a las personas por encima de los beneficios”.

La Internacional de la Educación y sus organizaciones miembros apoyan plenamente la propuesta de exención de los ADPIC y seguirán impulsando, tanto a nivel nacional como internacional, el acceso equitativo a las vacunas y los productos médicos que salvan vidas. Haga clic aquí para obtener más información sobre la propuesta de exención de los ADPIC.

Más del 75% de las vacunas #Covid19 se han usado en solo 10 países ‼️Los monopolios de vacunas están creando una escasez artificial. Instamos a los miembros de la @wto a apoyar la propuesta de #TRIPSwaiver e impulsar la producción mundial de vacunas.➡️ https://t.co/PVSvYybpa6 pic.twitter.com/NL6E28l4Uc

— eduint (@eduint) March 11, 2021

Vacunación de docentes: garantizar un retorno seguro y permanente a la educación presencial

Asimismo, los participantes en el webinario abordaron la repercusión de la pandemia en el sector de la educación. David Edwards puso de manifiesto que “el nacionalismo de las vacunas corre el riesgo de prolongar la crisis, el cierre de escuelas, la interrupción educativa durante los próximos meses e incluso años. Durante ese tiempo, nos arriesgamos a perder aún más docentes a causa de la pandemia. Nos arriesgamos a perder todavía más estudiantes a causa del trabajo infantil, el matrimonio precoz y un futuro desolador”. Lograr un retorno seguro y permanente a la educación presencial en todo el mundo requiere un acceso equitativo a las vacunas en todas partes.

En diciembre de 2020, en el 60º aniversario de la convención que promueve el derecho universal a la educación, la Unesco y la Internacional de la Educación lanzaron un llamamiento conjunto a fin de que los educadores constituyan uno de los grupos prioritarios en el lanzamiento mundial de vacunas. En su intervención dirigida a los participantes del webinario, el miembro de la Unesco Carlos Vargas Tamez presentó un análisis inicial sobre la situación de los docentes y del personal de apoyo educativo en las estrategias nacionales de vacunación. Además de reconocer el importante papel que desempeñan los sindicatos de la educación a la hora de garantizar la consecución de esta prioridad en la recepción de las vacunas, Vargas Tamez instó a las afiliadas de la Internacional de la Educación a seguir luchando por la salud y la seguridad de los docentes, una condición indispensable para lograr un retorno rápido y seguro a la educación presencial en todas partes.

Unidad de propósitos: los sindicatos trabajan conjuntamente a fin de proteger a las comunidades escolares en todas partes

Los sindicatos de la educación se están movilizando por la equidad de las vacunas y un retorno seguro a la educación presencial en todo el mundo. Colaborando juntos a escala nacional e internacional, los sindicatos hacen campaña contra el nacionalismo de las vacunas y presionan a sus Gobiernos para que den prioridad a las vidas antes que a los intereses comerciales. Por otro lado, los sindicatos también están trabajando en sus respectivos países y comunidades con el fin de combatir las noticias falsas en torno a las vacunas e de incrementar al máximo el nivel de aceptación tan pronto como se aseguren los suministros.