El Comité syndical francophone de l’Éducation et de la Formation (Comité Sindical Francófono de la Educación y la Formación) ha señalado en un webinario que los docentes del mundo francófono han hecho gala de ingenio y adaptabilidad para responder a las necesidades educativas de sus estudiantes, aunque el cierre provocado por la epidemia de la COVID-19 les cogiera desprevenidos.
Durante el webinario “La enseñanza a distancia, a prueba sobre el terreno”, celebrado el pasado 7 de mayo, el Institut de la Francophonie pour l’éducation et la formation(Instituto de la Francofonía para la Educación y la Formación) optó por ceder la palabra al Comité syndical francophone de l’Éducation et de la Formation– CSFEF, organismo que agrupa a las organizaciones miembros de los países francófonos de la Internacional de la Educación.
De este modo, Jean-Hervé Cohen, presidente del CSFEF, tuvo la ocasión de dar distintos ejemplos de información obtenida sobre el terreno, que revelaban que el trabajo escolar en los hogares distaba mucho de ser operativo en la mayoría de los países del África francófona.
En sus palabras, “es un hecho que los docentes han demostrado una gran iniciativa y dinamismo para mantener, con mayor o menor éxito, el vínculo con los alumnos en este período difícil en el que nos encontramos”, ya que “el cierre repentino de las instituciones de enseñanza ha conmocionado el sistema educativo de un buen número de países. Los docentes y sus alumnos tuvieron que dar una respuesta rápida para preservar la continuidad de la educación y hacerse con nuevas herramientas, aunque muchos de ellos apenas estuvieran preparados”.
Además, el presidente del CSFEF reconoció que la comunidad escolar debe enfrentarse a numerosas dificultades derivadas de la diversidad en el material disponible en los distintos países. Por ejemplo, el funcionamiento de las herramientas digitales deja mucho que desear en bastantes lugares, por lo que se ha recurrido a otros soportes, como la televisión, la radio o el correo postal.
Cohen añadió que “los docentes no deben fustigarse por el nivel de la enseñanza a distancia, sino reaccionar colectivamente para garantizar la continuidad de la educación con la mejor calidad posible. No nos engañemos: la enseñanza a distancia no ofrece el tipo de interacción ideal entre docentes y estudiantes”.
Vídeo del webinario (en francés):