En respuesta a la violencia racial en Charlottesville, Virginia, los sindicatos de la educación de Estados Unidos se han comprometido firmemente a defender la diversidad y promover la tolerancia y la justicia para todos/as.
Tanto la National Education Association (NEA) como la American Federation of Teachers (AFT) han expresado su preocupación por la violencia por motivos raciales en una congregación de grupos de derechas y han llamado a la acción para proteger los derechos y seguridad de todos/as los/as estadounidenses.
NEA: la diversidad hace la fuerza
“El odio, la violencia y el racismo no tienen cabida en nuestros campus o en nuestras ciudades”, subrayó la presidenta de la NEA y vicepresidenta de la Internacional de la Educación (IE), Lily Eskelsen García. “Somos fuertes gracias a nuestra diversidad”.
El 14 de agosto, Eskelsen García y Jim Livingston, presidente de la Virginia Education Association (VEA), hicieron la declaración siguiente: “Personas fanáticas cargadas de odio volvieron a Charlottesville en un despreciable intento de provocar miedo y terror. A su paso, murieron tres personas, muchas personas resultaron heridas y la comunidad quedó traumatizada”.
Una mujer joven murió atropellada por un hombre que conducía un coche entre la multitud de manifestantes y dos oficiales de policía perdieron la vida cuando un helicóptero se estrelló mientras vigilaban los acontecimientos.
Solidaridad
La VEA y la NEA han desarrollado recursos para que estudiantes, docentes y familias participen y se involucren en el diálogo nacional sobre racismo, odio y prejuicios, los cuales pueden ser utilizados tras los recientes acontecimientos en Charlottesville.
AFT: Más fuertes cuando aceptamos la diversidad
Además, la presidenta de la AFT, Randi Weingarten, expresó la preocupación de su sindicato por los acontecimientos en Charlottesville. “La atroz demostración de odio racial de esta marcha va en contra de nuestros valores como estadounidenses”.
En una declaración del 13 de agosto, Weingarten, la secretaria de tesorería de la AFT, Lorretta Johnson, y la vicepresidenta ejecutiva de la AFT, Mary Cathryn Ricker, explicaron que “lo que ocurrió en Charlottesville mostró un oscuro punto de inflexión en Estados Unidos. No es solo un duro recordatorio del racismo y antisemitismo reales que corren por las venas de los/las estadounidenses, sino también un llamamiento para alzarse contra las fuerzas del odio y la división en este país que se sienten envalentonadas hoy”.
Es necesario actuar
Además, se muestran firmes en cuanto a que “la situación exige más que simplemente denunciar el odio; es necesario actuar para proteger los derechos básicos y la seguridad de las familias estadounidenses de aquellos que siembran terror y odio”.
Van más allá y piden al Presidente de los Estados Unidos, al Departamento de Justicia y al FBI que lleven a cabo “investigaciones reales y transparentes sobre el terrorismo de los supremacistas blancos”, y a los/as funcionarios/as electos/as y las autoridades encargadas del cumplimiento de la ley de los 50 estados que usen todos los recursos a su disposición para mantener la seguridad de las comunidades.
La AFT organizó vigilias por todo el país el 13 de agosto con Indivisible y otras organizaciones comprometidas con la seguridad, la tolerancia y la justicia de todos/as los/as estadounidenses/as.
Sus planes de clases gratuitas Share My Lesson sobre derechos civiles, acoso y ayuda a los/as estudiantes para superar sucesos traumáticos y ayudar a las familias y educadores/as a hablar con los/as niños/as sobre este tipo de acontecimientos pueden descargarse aquí.