Un nuevo documento de política del Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo afirma claramente que los manuales escolares pueden contribuir en gran medida a fomentar la tolerancia e influir positivamente sobre la opinión y la aceptación que tienen los jóvenes con respecto a la diversidad sexual.
Los manuales escolares no son nunca neutrales, según el nuevo documento de política del Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo (GEM) Entre las líneas, que examina el contenido de los manuales escolares y cómo refleja algunos de los conceptos clave de la Meta 7 del Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 de la ONU relativo a la educación mundial.
Los manuales escolares transmiten mensajes influyentes que contribuyen a configurar las ideas que tienen los niños y los jóvenes acerca de lo que es “normal” y legítimo en su sociedad. Aunque los libros de texto exhortan cada vez más a la tolerancia de la diversidad, la diversidad sexual sigue estando demasiado a menudo excluida y la inmensa mayoría de los manuales escolares siguen solamente mostrando parejas, relaciones y familias heterosexuales, según el informe.
El documento de política del informe GEM afirma que existen tres tipos de libros de texto a la hora de abordar la diversidad sexual: los que abordan el tema a través de mensajes positivos implícitos o explícitos; los que ignoran el tema totalmente; y los que lo abordan con mensajes negativos e inculcan actitudes discriminatorias.
La inclusión de las cuestiones LGBTI
El nuevo documento de política indica que los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero o intersexuales (LGBTI) figuran en solo el 3% de los manuales de estudios sociales de secundaria. No se ha registrado prácticamente ningún cambio desde los años setenta, aunque hay variaciones regionales significativas: donde más se abordan los derechos del colectivo LGTBI es en América Latina y el Caribe (20%), mientras que en África Subsahariana y Septentrional y en Asia Occidental el colectivo LGTBI está reconocido en menos del 5% de los manuales escolares.
Aunque tan solo 25 países mencionan las cuestiones relacionadas con la orientación sexual y la identidad/expresión de género en sus programas de estudios nacionales o regionales, las investigaciones de la UNESCO han llegado a la conclusión de que la lucha contra la homofobia y la transfobia en la educación es más eficaz cuando las cuestiones relativas al colectivo LGBTI están incluidas en los planes de estudio y las unidades didácticas, y cuando las personas LGTBI son presentadas de manera positiva a través de diferentes materiales didácticos.
Cuando los libros de texto transmiten una imagen positiva de las diversas orientaciones sexuales e identidades y expresiones de género, comunican a todos los estudiantes que las personas LGTBI son una parte integrante y legítima de la sociedad, y afirman su igualdad de derechos y dignidad.
La necesidad de crear unos manuales escolares integradores
El documento reafirma que, de acuerdo con las directrices basadas en datos empíricos de la UNESCO y la Organización Mundial de la Salud, así como de numerosos organismos profesionales de doctores, psicólogos, docentes y padres, es seguro instruir a los niños y a los jóvenes sobre la igualdad de género y las diversas orientaciones sexuales e identidades y expresiones de género de una manera apropiada para su edad.
La Internacional de la Educación (IE) considera que los países deberían dar seguimiento a este progreso, ampliando la formación educativa integral sobre la sexualidad en sus programas de estudios y plasmando en los manuales escolares de todas las asignaturas y para todas las edades ejemplos que ilustren la diversidad de familias y relaciones y a las personas LGTBI.