Los sindicalistas de la educación australianos han rechazado rotundamente los acuerdos de financiación de la educación propuestos recientemente por el Ministro de Educación federal, ya que consideran que estos planes tendrían como resultado que las escuelas no reciban los recursos mínimos necesarios para proporcionar una educación de calidad.
El pasado 27 de septiembre, la Presidenta Federal de la Australian Education Union (AEU), Correna Haythorpe, declaró que renunciar a la financiación basada en necesidades después de 2017 implicaría que ninguna escuela pública alcance los estándares de financiación mínimos recomendados por la revisión Gonski.
La financiación Gonski está diseñada para garantizar que todos los niños son educados en escuelas con recursos adecuados. Esta financiación basada en necesidades se inició en 2014, después de que la Revisión independiente Gonski alertara de que había demasiados niños con un nivel de educación bajo debido a la falta de recursos. Los acuerdos Gonski se diseñaron para permitir que todos los sistemas educativos pudiesen adoptar un estándar mínimo de financiación en un plazo de seis años. Dicho plazo finaliza en 2019.
Las escuelas pueden invertir la financiación recibida de formas diversas que les ayuden a mejorar los resultados de los estudiantes, tales como: reducir la ratio de alumnos; contratar docentes especialistas adicionales para materias como la lectoescritura y las matemáticas; proporcionar mayor asistencia y apoyo a los estudiantes con discapacidades o problemas de conducta; y aumentar las aptitudes y los conocimientos de los docentes mediante formaciones.
No se ha consultado a los estados
"No se ha consultado a los estados, no se ha pedido la contribución de los expertos y no se han dado detalles del plan del Ministro Birmingham", declaró Haythorpe. "Totalmente el contrario a los acuerdos Gonski, que fueron el resultado de una consulta extendida y la revisión más exhaustiva de los acuerdos de financiación escolar de toda una generación”.
"Enfrentar unos estados con otros no servirá en absoluto para mejorar los resultados en las escuelas, lo que necesitamos es incrementar la financiación general para las escuelas y asignar los fondos adicionales a acciones que solucionen las situaciones de desventaja".
Balanza de recortes
Haythorpe advirtió que el plan de financiación de la Coalición, tal como se describe en el Presupuesto Federal, asignaría 3,9 mil millones de dólares australianos menos a las escuelas ya solo en 2018 y 2019, y que un 62 % del incremento de fondos federales iría a parar a las escuelas privadas, cuyas necesidades son mucho menores que las de las escuelas públicas.
Ahora, el Ministro de Educación, Simon Birmingham, dice que quiere recaudar fondos de algunos estados y dárselos a otros. "¿Cómo va a mejorar eso los resultados de los estudiantes? ¿Quién apoya el modelo de financiación del Ministro Birmingham?"
Los estados no dan su apoyo
Hay que reconocer, dijo, que la mayoría de Ministros estatales y territoriales ha rechazado el plan. En la última reunión de Ministros de Educación celebrada a finales de septiembre en Adelaida para debatir los acuerdos de financiación post-2017 para las escuelas, los ministros rechazaron la propuesta porque implicaba asignar menos fondos a las escuelas de los que habrían recibido con el acuerdo Gonski.
Por otro lado, Haythorpe explicó que el Ministro Birmingham ha reivindicado que los acuerdos Gonski firmados con cada estado eran injustos porque los estados están recibiendo cantidades diferentes de fondos federales para escuelas con las mismas necesidades. Birmingham quiere redistribuir los fondos entre los estados pero sin ofrecer ninguna financiación global adicional. Esto dejaría a algunos estados en condiciones de financiación todavía peores, dijo Haythorpe.
Por último, destacó que la presión que está ejerciendo la Coalición para sustituir el acuerdo Gonski por un acuerdo que lleve la mayor parte de los fondos federales a las escuelas privadas alejará a Australia todavía más del objetivo de garantizar que todos los niños reciben la ayuda que necesitan en la escuela.