Cuando finalmente se alcanza un acuerdo en la COP21 para evitar que la temperatura del planeta aumente más de dos grados, la educación que se necesita para fomentar la capacidad de que esto ocurra brilla por su ausencia.
Mientras se debate el Proyecto de Acuerdo de la Conferencia de las Partes 21 (COP21), las cuestiones más relevantes tales como la financiación de la lucha contra el cambio climático o el reconocimiento de la diferenciación de las responsabilidades de cada país han estado constantemente bajo el foco de atención. Sin embargo, el desarrollo de las capacidades de las naciones para abordar el cambio climático ha pasado desapercibido.
Siguiendo las delegaciones en París, Richard Langlois, consultor de la Internacional de la Educación, ha señalado que va a ser un gran desafío para los países desarrollar su propia capacidad fuera de un acuerdo climático.
"La educación y la formación son fundamentales para el fortalecimiento de estas capacidades y para acelerar la toma de conciencia necesaria entre los actores sociales y el público", declaró Langlois. De acuerdo con la IE, este es uno de los principales objetivos de la sección del artículo 8 del Proyecto de Acuerdo sobre el cambio climático.
Con el fin de mover con éxito a las sociedades lejos del carbón, la IE sostiene que el apoyo constante de los sistemas de educación es fundamental para el proceso. Todavía no se ha alcanzado ningún acuerdo en el tipo de actividades que necesitan ser reforzadas.
A pesar de que las conversaciones de la COP21 se acercan a su fin, los otros tres componentes que están siendo negociados en esta sección siguen pendientes, incluido el aumento de la ayuda de los países ricos a los países pobres, las medidas de transparencia y progreso así como el tipo de arreglos institucionales necesarios para implementar todo el proceso.