El Consejo Ejecutivo de la IE se solidariza con todos los sindicatos de la educación que trabajan a diario en medio del conflicto, en países en los que la amenaza y la realidad de la violencia están continuamente presentes.
Mientras París y Beirut tratan de asimilar los devastadores ataques de la semana pasada, el Consejo Ejecutivo de la Internacional de la Educación ha hecho pública su postura condenando el terrorismo y expresando su apoyo íntegro a sus afiliadas en países en los que la violencia es una realidad constante.
Transcripción íntegra de la declaración:
El Consejo Ejecutivo de la Internacional de la Educación, reunido en Bruselas del 16 al 19 de noviembre de 2015, desea hacer llegar su más sincero pésame a todos los afectados por los recientes ataques terroristas, pero sobre todo a los afectados por los sucesos en París, en Beirut y en el desierto del Sinaí. La barbarie y falta de humanidad de estos ataques pone en riesgo el entendimiento de los pueblos civilizados en cualquier lugar del mundo. Las personas que estaban llevando a cabo sus rutinas cotidianas haciendo compras, encontrándose con amigos y viajando fueron asesinadas por terroristas suicidas y asesinos cobardes y mezquinos, que actuaban siguiendo una ideología equivocada.
Es inquietante descubrir que algunos de estos actos cobardes fueron perpetrados por terroristas que explotaron la pobreza y desesperación de los refugiados que han viajado en condiciones terribles de miseria y poniendo en riesgo su vida, buscando una vida mejor en el norte de Europa. Los informes de que algunos de estos terroristas se encontraban entre los verdaderos refugiados que viajaban hacia el norte en los últimos meses no deberían alimentar los argumentos de aquéllos en los países del norte que quieren negarles el acceso a una vida mejor.
La diversidad de nacionalidades de los afectados por los atentados en París subraya el hecho de que se trata de un asunto global, más que nacional. No son sólo las naciones francesa, libanesa o egipcia quienes están afectadas por estos atentados. Éstos han tenido un impacto sobre la seguridad y la estabilidad de sociedades en todo el planeta. Requieren una respuesta global.
Parte de esta respuesta debe estar basada en la provisión de educación de calidad para todos, sobre todo a colectivos marginados y desfavorecidos, y en el acceso a una educación que promueva la tolerancia y la comprensión, que reconozca y respete la diversidad pero afronte a aquéllos cuyos valores incluyan la opresión y la muerte de otros en actos vergonzosos de odio y radicalismo religioso. Estos asesinatos deberían dar un mayor impulso a la necesidad de una implementación eficaz y urgente de los recientemente adoptados objetivos de desarrollo sostenible. La consecución de estos objetivos ayudaría a eliminar muchos de los problemas sociales y económicos que han llevado a la proliferación de estas organizaciones terroristas.
La Internacional de la Educación está comprometida a trabajar con organizaciones afines y agencias intergubernamentales de todo el mundo para promover la paz, la tolerancia y el entendimiento muto. También está preparada a hacer frente a aquellos que piensan que su ideología corrupta e intolerante justifica la explotación y el asesinato de personas inocentes. El Consejo Ejecutivo de la IE llama a las organizaciones miembros de la IE a animar a sus miembros a que renueven su compromiso individual en la promoción de la paz, la justicia y la tolerancia en sus escuelas y otras instituciones educativas, y a llamar a los educadores en todo el mundo a unirse en pro de la implementación de los objetivos de desarrollo sostenible.
Nos solidarizamos con todos los sindicatos de la educación que trabajan cada día en países en los que la amenaza y la realidad de la violencia están constantemente presentes.