¿Puede la lectura, la escritura y el cálculo numérico compaginarse con la salud pública, con estilos de vida sostenibles y la ciudadanía global en la política educativa? La Internacional de la Educación y sus sindicatos afiliados respondieron afirmativamente hace dos años a través de su campaña Unámonos por la Educación de Calidad, centrada en tres pilares: docentes de calidad, herramientas de calidad y entornos de calidad para la enseñanza y el aprendizaje.
Estos tres pilares ocuparon un primer plano en el reciente Foro Mundial sobre la Educación, donde los delegados y delegadas de todo el mundo, incluyendo un fuerte contingente de la IE, debatieron y elaboraron la Declaración de Incheon. Además de convenir en “garantizar que los docentes y educadores estén facultados para actuar con autonomía, se les contrate correctamente, cuenten con una buena formación, estén profesionalmente cualificados, se les motive y apoye con los recursos necesarios, cuenten con sistemas administrativos eficientes y efectivos”, el documento define la educación de calidad como una ventaja que “permitirá a los ciudadanos llevar una vida sana y plena, tomar decisiones fundamentadas y responder a los desafíos locales y globales a través de la educación para el desarrollo sostenible (EDS) y la educación para la ciudadanía global (ECG)”.
El año pasado, la IE se incorporó a los signatarios de la Declaración Mundial sobre Salud, que afirma, entre otros elementos, que “La salud y las políticas sociales deben ser adaptadas, formuladas e integradas en las políticas, procesos y prácticas de los sistemas educativos. En resumen, la salud debe encontrar la forma de arraigarse culturalmente en el sistema educativo”.
Durante tres días a partir de esta semana, toda una diversidad de organizaciones mundiales de la salud, de la educación y de la ONU van a reunirse para abordar temas relativos a la integración de disciplinas tales como la salud y la sostenibilidad social en las escuelas como una forma de mejorar tanto los resultados educativos como la salud.
El Secretario General Adjunto de la IE David Edwards presenta varias ponencias en la conferencia y ayudó a trazar en Incheon la conexión entre las duramente conseguidas conquistas tanto en favor de los docentes y los alumnos así como en favor de la educación pública y el tema de la integración de los programas sociales y sanitarios en los sistemas educativos.
“En muchos lugares del mundo se observan políticas que reducen los fondos destinados a la educación cuando los resultados de las pruebas disminuyen. Tenemos que cambiar esta relación y definir el éxito más allá de los puntajes límites en lo que concierne la lectura, la escritura y el cálculo numérico”, señaló Edwards. “Mejorar la salud de los estudiantes, el compromiso cívico de sus familias y aspectos tales como la situación del agua y la nutrición en sus comunidades y factores críticos en términos de resultados educativos y bienestar social. Existe una gran oportunidad para que la salud y la educación vayan a la par de manera sistémica”.
La conferencia está patrocinada por la IE y su socio ASCD en cooperación con el programa educativo de la UNESCO y la red internacional de salud escolar, International School Health Network.
A lo largo de los tres días, las discusiones incluirán la presentación de ejemplos de programas en materia de integración escolar y sanitaria en Alemania, Canadá, Nueva Zelanda, Francia, Dinamarca, Irlanda, Japón y Hong Kong. La perspectiva de los sindicatos afiliados europeos de la IE fue presentada por Susan Flocken, Coordinadora de Política interna, Salud y Seguridad en el Trabajo de la Oficina Regional Europea de la IE, el CSEE.