En México, la indignación sigue creciendo mientras prosiguen los frenéticos esfuerzos de búsqueda por encontrar a los 43 estudiantes detenidos por la policía municipal mexicana supuestamente controlada por los carteles de la droga en la ciudad de Iguala.
Decenas de miles de personas están participando en las protestas en todo el territorio mexicano para pedir el regreso de los 43 estudiantes tras su desaparición el pasado 26 de septiembre, al mismo tiempo que cientos de vigilantes locales están realizando una búsqueda puerta a puerta.
Los estudiantes desaparecieron después de que la policía y presuntos miembros de una banda abrieran fuego sobre sus autobuses en la ciudad sureña de Iguala, que se encuentra en el estado de Guerrero, plagado de violencia. Seis estudiantes fueron asesinados, mientras que docenas de otros fueron trasladados en coches patrulla a lugares desconocidos.
Mientras tanto, el temor de que muchos de los estudiantes ‘desaparecidos’ ya hayan sido asesinados está aumentando tras iniciarse pruebas forenses a docenas de cuerpos encontrados en una fosa común cerca de la ciudad durante el fin de semana.
La reacción internacional
En una carta enviada al Presidente de México Enrique Peña Nieto el 7 de octubre, el Presidente de la Federación Americana de Docentes (AFT, por sus siglas en inglés) Randi Weingarten condenó la violencia dirigida contra los estudiantes y pidió al gobierno mexicano que aumente sus esfuerzos de búsqueda y garantice a los manifestantes el derecho de reunión y de libertad de expresión.
“Nos unimos a los que se han estado manifestando en todo México para exigir la rendición de cuentas por los asesinatos y las desapariciones”, dijo Weingarten. “La participación de la policía y de los oficiales de seguridad en este ataque brutal es incomprensible y desestabiliza la sociedad civil y la protección del estado de derecho, que es fundamental para la gobernanza democrática”.
Circunstancias confusas
Los estudiantes, de una escuela de magisterio de Ayotzinapa en el Estado de Guerrero, habían terminado de participar en las manifestaciones de protesta por lo que consideraban prácticas de contratación discriminatorias para los docentes cuando comenzaron los enfrentamientos con la policía. Sin embargo, las explicaciones en cuanto a lo que sucedió a continuación difieren entre los estudiantes y la policía. Los estudiantes dicen que la policía asaltó los autobuses sin motivo, mientras que la policía afirma haber actuado después de que los estudiantes hubieran tomado los autobuses.
Fotos: cortesía de Wikimedia Commons Imágenes