La IE se ha sentido tranquilizada al saber que Rong Chhun, Presidente de la Asociación Independiente de Docentes de Camboya (CITA) y de la Confederación Camboyana de Sindicatos (CCU) fue puesto en libertad el mismo 21 de enero, varias horas después de su detención.
Rong Chhun y otros diez activistas fueron detenidos a las 9.30 a.m. del 21 de enero delante de la Embajada de Estados Unidos en Phnom Penh, adonde se dirigían dispuestos a entregar una petición solicitando la intervención de EE.UU. para lograr la puesta en libertad de los trabajadores y defensores de los derechos humanos que habían sido detenidos tras una ofensiva desplegada por la policía a principios de mes.
Rong Chhun y sus compañeros fueron trasladados a la jefatura de la policía y serían finalmente puestos en libertad aproximadamente a las 2 p.m. de ese mismo día.
Rong Chhun ya había sido citado el 14 de enero por el Tribunal Municipal de Phnom Penh para que respondiera a una serie de preguntas relacionadas con la huelga y la manifestación que los trabajadores y trabajadoras del sector de la confección habían convocado con el objetivo de exigir una subida del salario mínimo. El tribunal le dejó en libertad, pero siguió no obstante investigándole.
Violación sistemática de los derechos de los trabajadores La IE escribió a las autoridades camboyanas para condenar el arresto del Presidente de la CITA así como la persistente violación de los derechos de los trabajadores en Camboya.
Este nuevo y preocupante episodio del constante acoso que sufren los dirigentes y sindicalistas de la CITA demuestra la falta de respeto del Gobierno por los derechos que los docentes deberían poder disfrutar en virtud de las garantías establecidas por las normas internacionales del trabajo y las disposiciones que se incluyen en las Recomendaciones de la OIT-UNESCO relativas a la situación del personal docente.
En junio de 2013, la Comisión de Aplicación de Normas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) volvió a situar a Camboya en el centro de la atención internacional por incumplimiento de las normas internacionales del trabajo, y en particular del Convenio 87 de la OIT sobre la libertad sindical y la protección del derecho de sindicación.
En sus conclusiones, la Comisión “ tomó nota con preocupación de los alegatos sobre la persistencia de la violencia, amenazas e intimidación contra dirigentes y afiliados sindicales” y “ recordando que los derechos sindicales de los trabajadores y de los empleadores sólo pueden ejercerse en un clima desprovisto de violencia, presiones o amenazas de toda índole, la Comisión urgió al Gobierno a que tome las medidas necesarias para poner fin a la impunidad en relación con los actos de violencia contra sindicalistas”.
La Comisión solicitó asimismo al Gobierno camboyano que tome nuevas medidas para garantizar los derechos a la libertad sindical de los funcionarios públicos.
La IE seguirá observando atentamente la situación de los derechos de los docentes en Camboya.