En un foro celebrado en la Universidad Politécnica de la ciudad de Manila, sindicalistas docentes y estudiantes pudieron obtener información de primera mano sobre las operaciones que llevan a cabo los llamados Centros de Educación Privada Asequibles (APEC, por sus siglas en inglés) en su país.
Más de 250 miembros y dirigentes de sindicatos de docentes, estudiantes y asistentes del público general han participado en un foro dedicado a la puesta en marcha de una investigación sobre la educación corporatizada en Filipinas.
Para muchos de los asistentes, el término "educación corporatizada" no quería decir gran cosa antes de entrar en el Sala Balagtas de la Universidad Politécnica de Filipinas, el 29 de octubre. Sin embargo, el evento, organizado conjuntamente por los afiliados de la Internacional de la Educación (IE) en el país, la Alliance of Concerned Teachers (ACT), la Teachers' Organisation of the Philippine Public Sector (TOPPS), la Samahang Manggagawang Pilipino-National Alliance of Teachers and Office Workers (SMP-NATOW) y la Federation of Free Workers (FFW), resultó una experiencia reveladora.
Como parte de la campaña nacional contra la privatización y la comercialización de la educación en Filipinas, el foro de tres horas de duración explicó cómo los llamados Centros de Educación Privada Asequibles (escuelas APEC) se habían hecho con el control empresarial de la educación en el país.
Ignorando la Constitución
Estas escuelas forman parte de una empresa conjunta de la empresa de educación mundial Pearson y del gigante empresarial local Ayala Corporation en Filipinas, y con frecuencia operan gracias a exenciones concedidas por el Ministerio Nacional de Educación en virtud de un Memorando de Entendimiento, en flagrante violación de la normativa Constitucional Normas sobre la prestación de educación primaria en el país.
Curtis Reip, autor de la investigación, que presentó los principales hallazgos a la audiencia, explicó que las escuelas APEC operan en espacios alquilados no utilizados como edificios comerciales, y carecen de laboratorios adecuados, bibliotecas y otras instalaciones conexas. El programa docente estandarizado y guionizado es impartido por maestros no autorizados, no cualificados y mal remunerados, sin ninguna libertad académica, añadió. Lo más preocupante es que la transferencia de fondos públicos a empresas privadas mediante el sistema de cupones ha agotado 12 mil millones de pesos filipinos del sistema público en beneficio de escuelas privadas como las APEC.
Algunos asistentes de alto nivel, como el Congresista Antonio Tinio, sostuvieron que la creciente privatización de la educación constituía una amenaza al derecho a la educación y que esta tendencia debía ser "cuestionada inmediatamente". Por otra parte, compartió los planes del Gobierno de aumentar la cantidad destinada al sistema de cupones en más de 20 billones de pesos. Mediante los cupones, el dinero público se transfiere a las escuelas con ánimo de lucro en lugar de ser invertido en la educación pública, apuntó con preocupación.
Tinio anunció su plan de proclamar una resolución en el Parlamento en los próximos días contra las escuelas APEC y exigir que el Ministerio de Educación revise el Memorando de Entendimiento.