El Sindicato Nacional de la Enseñanza-Federación democrática del trabajo (SNE-FDT por sus siglas en francés) de Marruecos, celebró su 10 º congreso, del 22 al 24 de febrero, en Marrakech. El tema del congreso fue "Todos en defensa de la educación pública, de la profesión de la enseñanza, de los derechos sindicales y de las libertades democráticas".
Este congreso tuvo lugar en un clima de tensión sin precedentes en el sector de la educación entre los sindicatos más representativos, como el SNE-FDT, y el Ministro de Educación Nacional, Mohamed El Ouafa.
Diversidad en las delegaciones y en los debates
Durante tres días, cerca de 600 delegados discutieron sobre temas relacionados con preservar la educación pública y garantizar una reforma del sistema educativo satisfactoria. Los participantes destacaron por su diversidad, pues había un gran número de jóvenes delegados del congreso, y muchas mujeres.
También asistió una numerosa delegación extranjera, en la que se encontraba Agnès Breda, en representación de la Internacional de la Educación, el Presidente del Comité sindical francófono de la Educación y de la Formación, Ferrari Roger; Elie Jouen, en representación de la Marcha Global contra el Trabajo Infantil, así como representantes de los siguientes sindicatos: AOb (Países Bajos), FETE-UGT, FECCOO (España), UNPEF (Argelia), SGEB (Túnez), GUPT (Palestina), SNEM (Mauritania) y KTS (Kuwait).
EI: La unidad sindical es esencial
Reconociendo que la región árabe necesita sindicatos fuertes para conseguir sus objetivos y que la fuerza se obtiene con la unidad, Breda declaró en su discurso a la Conferencia: "Habéis celebrado vuestro congreso sobre el tema de la unidad - la búsqueda de la unidad sindical para defender mejor la educación marroquí y la profesión docente.
Se trata de un gran problema que requiere que encontréis la fuerza necesaria para enfrentaros a él, puesto que la situación en la que se encuentra la educación pública nunca ha sido más difícil. Es difícil aquí, en Marruecos, y es difícil en toda la región; es difícil en el Sur, pero también es muy difícil en el norte”.
Breda lamentó que la educación pública estuviera en peligro en todo el mundo, debido a los planes de austeridad elegidos para responder a la crisis de la deuda, que supuso un recorte del gasto público, incluyendo a los presupuestos de educación.
Por otra parte, Breda insistió en que los gobiernos están utilizando la crisis económica como pretexto para pisotear los derechos sindicales de los empleados. Como funcionarios públicos, a los docentes se les niegan sus derechos sindicales muy a menudo, en particular, el derecho de sindicación y el derecho de huelga.
Inversión pública en maestros cualificados y bien remunerados
"Frente a estos enormes problemas, decimos que la educación no debe verse afectada por la crisis, puesto que constituye una parte integral de la solución a la crisis", explicó Breda. "Debemos hacer que todos los gobiernos del planeta entiendan que la inversión en la educación pública de calidad y la formación son la clave para una recuperación duradera y para una economía más sana y más justa para el futuro".
Asimismo, Breda hizo hincapié en el hecho de que invertir en la educación para el desarrollo de su país a largo plazo es, con diferencia, la mejor respuesta que puede aportar cualquier gobierno. Sin embargo, eso no puede lograrse sin la contratación masiva de docentes bien capacitados y bien remunerados.
"Vosotros estáis luchando por esto aquí, en Marruecos, porque sois docentes sindicalistas convencidos de que un país solo puede construir un futuro democrático si cuenta una población bien formada y con unos ciudadanos responsables y conscientes", concluyó.
Exigimos que se respete el diálogo social
Solo unos días antes de que empezara el congreso, se organizó la última huelga nacional por parte las confederaciones sindicales, la Confederación democrática del trabajoy de la FDT. Esto fue en protesta contra la ofensiva, sin precedentes, del Ministerio sobre los derechos sindicales, y sus intentos de poner a la opinión pública en contra de los docentes, al intentar responsabilizar a la profesión docente del fracaso de las políticas educativas del gobierno.
La huelga también representó una oportunidad para que los docentes expresaran su descontento y preocupación por la forma en que el ministro de Educación Nacional llevó a cabo los asuntos de su ministerio y su decisión de reducir los sueldos de los maestros en huelga.
Esta política está condicionada por el deseo del Ministerio de reducir el diálogo social a algo parecido a un ejercicio de escucha, así como de evitar hablar con los sindicatos más representativos.
El SNE-FDT mostró su voluntad política de unir fuerzas con el SNE-CDT. Esta búsqueda de la unidad responde al aumento del islamismo en Marruecos, que los docentes sindicalistas quieren combatir.
Un sistema disfuncional
La opinión expresada por los participantes de que la educación pública en Marruecos se encuentra en graves dificultades fue unánime. Ni la Carta Nacional de Educación y Formación ni el Plan de Emergencia han sido capaces de resolver estas dificultades.
La escasez aguda de recursos humanos, el deterioro constante de las escuelas, el hacinamiento en las aulas, y la violencia en las escuelas, son problemas que afectan a la educación pública.
El SNE-FDT ha pedido en reiteradas ocasiones que se proteja la educación pública, haciendo frente a la grave escasez de personal docente y administrativo, y poniendo fin al hacinamiento en las aulas, a los métodos de enseñanza deficientes, así como a la supresión de equipos de investigación en temas científicos.
Haga clic aquí para leer el discurso completo de Agnès Breda (en francés) ante el congreso del SNE-FDT.